El juez Garzón

¿Alguien se ha dado cuenta que algunos de los que quieren cortarle el pescuezo al juez que
Foto enviada por Salud



El autor de estos versos, nació en un pueblo de la margen izquierda del Tajo. Es muy bonito y tiene una plaza digna de ver, además de un parador que antiguamente fue la casa de Los Alba de Aliste. También tiene, bien conservada La Judería. Sus naturales tienen un acento especial, dentro de los dejes que aún se conservan por la zona. Procedentes quizá, del antiguo leonés. Fue enclave Templario. Paso obligado en el Tajo de la Ruta Lata, Balata o de la Plata, como se dice hoy.

Hace años, entre otras muchas, escribió lo que sigue:

¡VIVE Y RECUERDA!

Era una casa, una finca
de la campiña extremeña;
era un viejo con su silla
siempre sentado a la puerta,
siempre libros me leía,
libros viejos, libros nuevos
y cientos de poesías.
Y siempre que me marchaba
con seriedad me decía:
¡VIVE Y RECUERDA!

¡ASESINARON MIS SUEÑOS
CUANDO A SOÑAR COMENZABA!
Buscando nidos jugaba
un día de primavera,
un día del mes de mayo,
parecía un día cualquiera.

Entre romeros y encinas,
entre almendros y chumberas,
una casa campesina,
un viejo junto a la puerta.

Llegó la guardia civil,
también llegó otra pareja;
dos falangistas de azul,
los dos con pistola al cinto,
los dos con camisa nueva
y golpearon al viejo
hasta romperle las piernas,
le machacaron el pecho,
le aplastaron la cabeza.
Y yo, mientras, lo miraba
metido entre las chumberas,
mi boca desencajada
ni respiraba siquiera.

La boca del pobre viejo
vomitaba sangre envuelta
mientras mi orín empapaba
mis dos temblorosas piernas.
Y fue en aquellos momentos,
fue entonces que me di cuenta;
aquel viejo no gritaba,
ni gemía, ni rogaba,.
Aquellos cuatro asesinos,
como perros con la rabia,
ante el silencio del viejo
más fuerte le golpeaban.
El cuerpo del pobre viejo,
su masa sanguinolenta,
con dos estremecimientos
expiró sobre la tierra.

Con él murieron mis sueños,
allí descubrí las fieras,
asesinos de uniforme,
criminales con bandera.

Un hoyo en la tierra blanda
y buscaron unas piedras
y lo tiraron al hoyo
y lo taparon con tierra.

Sesenta años pasaron
y sesenta primaveras,
el silencio de aquel viejo
sobre mi pecho golpea
mientras que sus asesinos,
lucen sobre sus guerreras
medallas, por defensores
de (su) patria y (su) bandera.

! ASESINARON MIS SUEÑOS
PERO MI MENTE RECUERDA! ... (ver texto completo)
¿Alguien se ha dado cuenta que algunos de los que quieren cortarle el pescuezo al juez que se atrevió a llamar por primera rebeldes y asesinos a los vencedores de nuestra incivil contienda, sólo sabe dialogar usando los mismos argumentos de esos de la foto?
Salud