El Juzgado de Primera Instancia Número 2 de San Lorenzo de El Escorial (Madrid) ha autorizado la exhumación de de los restos mortales de dos hermanos que fueron fusilados en julio de 1936 y enterrados en una fosa común en Calatayud (Zaragoza) y posteriormente, en 1959, trasladados al Valle de los Caídos junto a los restos de otros asesinados.
En un auto, al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, el juez Jose Manuel Delgado estima la petición de la nieta de los fallecidos para recuperar los restos mortales de Manuel y Antonio Ramiro Lapeña Altabás, su abuelo y su tío abuelo, y reconoce su derecho a darles una "digna sepultura". Lo original de este caso es que se trata de la primera exhumación judicial en el Valle de los Caídos y del primer caso de exhumación por vía civil, en base al Expediente de Jurisdicción Voluntaria, en aplicación del articulado de la perpetua memoria.
En un auto, al que ha tenido acceso EL ESPAÑOL, el juez Jose Manuel Delgado estima la petición de la nieta de los fallecidos para recuperar los restos mortales de Manuel y Antonio Ramiro Lapeña Altabás, su abuelo y su tío abuelo, y reconoce su derecho a darles una "digna sepultura". Lo original de este caso es que se trata de la primera exhumación judicial en el Valle de los Caídos y del primer caso de exhumación por vía civil, en base al Expediente de Jurisdicción Voluntaria, en aplicación del articulado de la perpetua memoria.