21 - 2 - 2022
CUANDO SUEÑO CON MI INFANCIA
Hay noches que voy soñando con amigas de la infancia, muchas veces me recuerdo que en mis sueños hubo trabajo, felicidad, y constancia, en mi querida y amada infancia, voy viendo todo lo que en aquel tiempo se llevaba, al ver gente trabajando, y a mi padre que labraba, mulas carros y borricos, eran tiempos que te marcan. Panaderos que sudando supieron darnos la calma, mientras las niñas jugando, nunca quisimos ser blandas. Eran tiempos que ahora sueño, una vida muy anhelada, cuantas horas cuantos días en las calles se pasaban. Cuando recorro mi pueblo, que es mi tierra siempre amada, me recuerdo de aquel tiempo de mi infancia tan soñada. Las llanuras me marcaron, soy de tierra toledana, aunque cambie de destino la vida nunca las sombras se marchan. Puedes pisar mil caminos, andar por cien mil cañadas, vivir buscando esperanza que algunas veces se alcanza. Más llevas a Villanueva de Alcardete, en el corazón guardada, nombres de calles bonitas, lugares que nadie quiere olvidarlos, los sueños dicen que somos historias medio borradas. Más seguimos con los sueños, notamos ciertas jornadas, que vivimos desde lejos incluso en las frías madrugadas. Con los sueños vas notando, que en la vida todo engancha, y no logras olvidarte de las cosas de tu infancia.
ROSARIO FAJARDO BLANCO.
CUANDO SUEÑO CON MI INFANCIA
Hay noches que voy soñando con amigas de la infancia, muchas veces me recuerdo que en mis sueños hubo trabajo, felicidad, y constancia, en mi querida y amada infancia, voy viendo todo lo que en aquel tiempo se llevaba, al ver gente trabajando, y a mi padre que labraba, mulas carros y borricos, eran tiempos que te marcan. Panaderos que sudando supieron darnos la calma, mientras las niñas jugando, nunca quisimos ser blandas. Eran tiempos que ahora sueño, una vida muy anhelada, cuantas horas cuantos días en las calles se pasaban. Cuando recorro mi pueblo, que es mi tierra siempre amada, me recuerdo de aquel tiempo de mi infancia tan soñada. Las llanuras me marcaron, soy de tierra toledana, aunque cambie de destino la vida nunca las sombras se marchan. Puedes pisar mil caminos, andar por cien mil cañadas, vivir buscando esperanza que algunas veces se alcanza. Más llevas a Villanueva de Alcardete, en el corazón guardada, nombres de calles bonitas, lugares que nadie quiere olvidarlos, los sueños dicen que somos historias medio borradas. Más seguimos con los sueños, notamos ciertas jornadas, que vivimos desde lejos incluso en las frías madrugadas. Con los sueños vas notando, que en la vida todo engancha, y no logras olvidarte de las cosas de tu infancia.
ROSARIO FAJARDO BLANCO.
¡Ay de la infancia y la juventud siempre y en todo tiempo adorada! Se ha quedado muy lejos y es y será por siempre amada, da igual las penurias o las glorias vividas. Los recuerdos selectivos los guardaremos entre algodones y los añoraremos generación tras generación.