DIA 7 – 11 – 2022
EL OTOÑO Y LA MELANCOLIA
Recuerdo siendo niña que el otoño nunca me parecía ser una época de melancolía, ahora si me parece que es la estación del año más melancólica, o como dicen en Galicia, nostalgia y morriña con saudade. Van los días siendo cada vez con menos horas de sol, las nubes, aunque no llueva lo suficiente se las ve de vez en cuando, todo este ambiente entre mayor voy siendo, más nostalgia me acompaña. Ahora entiendo como la edad influye en los pensamientos, y pasas de buscar alegría y diversión a vivir tranquila y recordando tiempos pasados, incluso de niña cuando mi padre venía de hacer la siembra en las tierras de labranza, Por cierto, ahora no ha llovido lo suficiente, y la tierra está demasiado seca para la siembra de cereales, sospecho que nos espera un año difícil, sobre todo en los lugares que no ha caído ni gota. El ganado de entonces como eran mulas y burros, en esta época del año sí que sentían ganas de estar metidos en sus cuadras, parece ser que el frío les molestaba, y hasta eso parece que ha cambiado, El cambio climático nos esta afectando a todos, antes lo veíamos muy lejos, ahora lo tenemos encima. No sabemos que pasará, ahora lo que realmente preocupa es la falta de agua en los pantanos y fuentes. Hay dos cosas que nos preocupan a las personas normales, La guerra de Ucrania y su deriva en la economía, y la sequía en todo el planeta, que puede aumentar la emigración para evitar la hambruna. Con todo lo que arrastra.
ROSARIO FAJARDO BLANCO.
EL OTOÑO Y LA MELANCOLIA
Recuerdo siendo niña que el otoño nunca me parecía ser una época de melancolía, ahora si me parece que es la estación del año más melancólica, o como dicen en Galicia, nostalgia y morriña con saudade. Van los días siendo cada vez con menos horas de sol, las nubes, aunque no llueva lo suficiente se las ve de vez en cuando, todo este ambiente entre mayor voy siendo, más nostalgia me acompaña. Ahora entiendo como la edad influye en los pensamientos, y pasas de buscar alegría y diversión a vivir tranquila y recordando tiempos pasados, incluso de niña cuando mi padre venía de hacer la siembra en las tierras de labranza, Por cierto, ahora no ha llovido lo suficiente, y la tierra está demasiado seca para la siembra de cereales, sospecho que nos espera un año difícil, sobre todo en los lugares que no ha caído ni gota. El ganado de entonces como eran mulas y burros, en esta época del año sí que sentían ganas de estar metidos en sus cuadras, parece ser que el frío les molestaba, y hasta eso parece que ha cambiado, El cambio climático nos esta afectando a todos, antes lo veíamos muy lejos, ahora lo tenemos encima. No sabemos que pasará, ahora lo que realmente preocupa es la falta de agua en los pantanos y fuentes. Hay dos cosas que nos preocupan a las personas normales, La guerra de Ucrania y su deriva en la economía, y la sequía en todo el planeta, que puede aumentar la emigración para evitar la hambruna. Con todo lo que arrastra.
ROSARIO FAJARDO BLANCO.