MUSEO DE BADALONA
Tiene Badalona un maravilloso museo arqueológico en el que se puede admirar la ciudad romana de Beatula desde un sobresuelo establecido mediante una estructura metálica, con gran parte de cristal, que te permite ver desde arriba con toda exactitud y en perfecta conservación, la estructura de aquella ciudad romana que fue fundada 100 años antes de nuestra era, o sea 100 años antes del nacimiento de Cristo.
Fue descubierta en 1944 y abierta al público en 1966 y es, yo creo, la mejor exposición de este tipo de las que se ofrecen al público en toda España-por su originalidad y por el perfecto estado de conservación de la misma, así como su extensión y porque es una perfecta forma de proteger todo el conjunto de manera que las futuras generaciones puedan visitarlo y disfrutarlo.
Se ha recuperado toda una ciudad de más de 2100 años en la que se aprecia perfectamente su calle principal, el alcantarillado que es todo un ejemplo de ingeniería y de calculada seguridad y funcionalidad, se observan las termas y baños públicos que en aquella época eran precisos para que los ciudadanos se asearan y se bañaran ya que no había agua en las casas. Podían acceder a ellas hombres, mujeres y niños, las mujeres por la mañana y los varones por la tarde, pudiendo asistir toda la población porque el precio era mínimo y a nadie se negaba el acceso ni siquiera a los sirvientes e incluso a los esclavos.
Se observan casas particulares, con sus cocinas, sus dormitorios y sus salones. Toda clase de tiendas, carnicería, frutería, taller de cerámica, de pavimentos, de tejas, de ornamentación, de estucado y en general todo un pueblo que nos transmiten como vivían y como trabajaban nuestros antepasados hace 2115 años.
Se completa esta magnífica obra con una amplia sala con vitrinas en la que se exponen restos de vasijas y objetos cerámicos encontrados en otras extracciones arqueológicas. Restos de objetos metálicos utilizado, de instrumentos y utensilios de huesos, de adorno, de ornamentación, de pulsera, anillos, collares, e incluso un telar para la fabricación de textiles.
Toda una gran lección de historia, de cultura y de tradición, que nos sirve para apreciar cuales eran los fundamentos de nuestra sociedad en aquella época y también el grado de desarrollo que ya habían adquirido con su esfuerzo y con su ingenio en unos tiempos donde todo había que inventarlo y perfeccionar lo partiendo de la nada. Hay que ver este monumento si se pasa por aquí porque la historia nos enseña a valorar el esfuerzo y el orgullo de lo que cada uno de nosotros es capaz de aportar a nuestra sociedad en beneficio de ella y de todos sus ciudadanos.
Tiene Badalona un maravilloso museo arqueológico en el que se puede admirar la ciudad romana de Beatula desde un sobresuelo establecido mediante una estructura metálica, con gran parte de cristal, que te permite ver desde arriba con toda exactitud y en perfecta conservación, la estructura de aquella ciudad romana que fue fundada 100 años antes de nuestra era, o sea 100 años antes del nacimiento de Cristo.
Fue descubierta en 1944 y abierta al público en 1966 y es, yo creo, la mejor exposición de este tipo de las que se ofrecen al público en toda España-por su originalidad y por el perfecto estado de conservación de la misma, así como su extensión y porque es una perfecta forma de proteger todo el conjunto de manera que las futuras generaciones puedan visitarlo y disfrutarlo.
Se ha recuperado toda una ciudad de más de 2100 años en la que se aprecia perfectamente su calle principal, el alcantarillado que es todo un ejemplo de ingeniería y de calculada seguridad y funcionalidad, se observan las termas y baños públicos que en aquella época eran precisos para que los ciudadanos se asearan y se bañaran ya que no había agua en las casas. Podían acceder a ellas hombres, mujeres y niños, las mujeres por la mañana y los varones por la tarde, pudiendo asistir toda la población porque el precio era mínimo y a nadie se negaba el acceso ni siquiera a los sirvientes e incluso a los esclavos.
Se observan casas particulares, con sus cocinas, sus dormitorios y sus salones. Toda clase de tiendas, carnicería, frutería, taller de cerámica, de pavimentos, de tejas, de ornamentación, de estucado y en general todo un pueblo que nos transmiten como vivían y como trabajaban nuestros antepasados hace 2115 años.
Se completa esta magnífica obra con una amplia sala con vitrinas en la que se exponen restos de vasijas y objetos cerámicos encontrados en otras extracciones arqueológicas. Restos de objetos metálicos utilizado, de instrumentos y utensilios de huesos, de adorno, de ornamentación, de pulsera, anillos, collares, e incluso un telar para la fabricación de textiles.
Toda una gran lección de historia, de cultura y de tradición, que nos sirve para apreciar cuales eran los fundamentos de nuestra sociedad en aquella época y también el grado de desarrollo que ya habían adquirido con su esfuerzo y con su ingenio en unos tiempos donde todo había que inventarlo y perfeccionar lo partiendo de la nada. Hay que ver este monumento si se pasa por aquí porque la historia nos enseña a valorar el esfuerzo y el orgullo de lo que cada uno de nosotros es capaz de aportar a nuestra sociedad en beneficio de ella y de todos sus ciudadanos.