Siento recordarte Manuel, La Santa Inquisición Fue...

LA GUERRA MODERNA

Francia sufre desesperada el mayor y más cruel ataque terrorista de su historia y Europa entera se solidariza en el sufrimiento y en el horror con tan execrable hecho que ha llenado de sangre y de pena toda Francia.

El islamismo dihayista y esa brutal e injustificable maldad que lleva a seres humanos a sacrificar, voluntariamente, su propia vida para asesinar masivamente es la peor de las guerras, la más cruel y la más sanguinaria. Al mismo tiempo la más difícil de soluciona porque aquí el enemigo se inmola llevandose por delante la vida de muchos de nuestros soldados. Neva YoK, Londes, Madrid y ahora Francia son ejemplos de esa locura, de esa sin razón que utiliza una religión para justificar que hay que quitar la vida a los demás, a costa de su propia vida, para conseguir la gloria eterna. O sea que hay que ser un criminal y un suicida para ganar el cielo. Pues vaya una religion que promete la paz y el premio a costa de derramamientos de sangre.

En este último atentado han demostrado que también están aprendiendo a preservar su vida y a utilizar un terrorismo más convencional pero no menos cruel porque se han entretenido en conseguir más de mil rehenes a los que después uno a uno iban fusilando en presencia de los demás.

Es inmenso el dolor que esto origina a la sociedad pero no es menos penosa la impotencia de solucionar esta macabra e inhumana contienda porque si utilizando los derechos humanos y la tolerancia hemos llegado hasta aquí que sería si empezamos a utilizar los tanques y la bv ¡alas para solucionarla.

Se les ha venido dando cobijo, dando trabajo, dando un lugar en la sociedad con total igualdad con los nativos del país, se les ha dado libertad religiosa, política y social y ellos siguen anidando en su interior un odio y un rencor fatal que solo se calma con el derramamiento de sangre.

Pues hay otras religiones y concretamente la mía te enseña que cuando alguien te da una bofetada lo que debes hacer es poner la otra mejilla, no responder con violencia. Que Dios, ese Dios generoso y amoroso, nos de fuerzas y valor para ser capaces de poner la mejilla y nos ayude a perdonar a los que siembran el horror y la muerte y les permita, a ellos, encontrar el camino de la paz y del respeto a la vida de sus semejantes

Siento recordarte Manuel, La Santa Inquisición Fue tan cruenta y maldita que cualquiera de estos terroristas, los Reyes católicos la volvieron a imponer, a ordenes de Torquemada y se llamaban Católicos, que vergüenza, la reina todo el dia rezando y por otro lado dando ordenes de matar a su mismo marido Don Frenando, las religiones llevado al fanatismo es tan peligroso como el terrorismo y mas como este que también es religioso.
Lo siento pero la verdad no engaña a nadie.
Un saludo