LA POLÍTICA
No soy amigo de mezclar la gimnasia con la magnesia, o lo que es lo mismo, no me gusta hablar de política en mis escritos y en mis relaciones con los demás porque los pensamientos y los sentimientos son malos compañeros a la hora de entenderse, sobrellevarse, respetarse y aceptarse, y por eso para que todo pueda fluir y desarrollarse con normalidad, en una reunión de trabajo, en un blog de internet o en un grupo de amigos, en incluso familiar, lo mejor es dejar la política fuera.
Pero hoy es un día, especial, ayer tuvimos Elecciones Generales y ahora esperamos se forme un nuevo gobierno que tenga que regir los destinos de nuestro país, durante los próximos cuatro años.
Es un poco complicado porque ninguno de los partidos que se han presentado a la elección ha conseguido mayoría suficiente para gobernar, por si solo. Lo único que ahora hay que desear es que la responsabilidad de los políticos tenga en cuenta en sus decisiones los intereses de cada uno de nosotros y consigan un acuerdo de gobierno estable y firme para poder llevarnos por el camino de la recuperación, de la creación de empleo estable y digno y que sean capaces de encontrar acuerdos importantes en educación, sanidad y derechos sociales que hagan que los más necesitados recuperen su alegría de vivir y un futuro digno y estable para sus familias.
No se debe de hablar hoy de ganar o perder, se debe de hablar de soluciones, de regeneración democrática, de tolerancia y de participación para que entre todos seamos capaces de purificar esta democracia nuestra, que adolece de grandes defectos y de mejorarla con lo cual todos nos podemos considerar ganadores y necesarios, desde hoy, para alcanzar esas metas.
A si que yo desde aquí felicito a todos mis compatriotas porque, una vez más, ha ganado la democracia y por tanto con ella todos los demócratas, y a partir de hoy entre todos debemos ayudar a los que nos manden para que puedan ir mejorado nuestra vida y nuestro futuro llevando a nuestro país a mejores cotas de desarrollo, de bienestar y de progreso. Y todo ello hay que conseguirlo con un clima de estabilidad, de calma y de respeto, que es fundamental para que todos nos sintamos a gusto y para que todos nos sintamos importantes y necesarios en el empeño.
Felicidades a todos porque ayer ganamos los españoles.
No soy amigo de mezclar la gimnasia con la magnesia, o lo que es lo mismo, no me gusta hablar de política en mis escritos y en mis relaciones con los demás porque los pensamientos y los sentimientos son malos compañeros a la hora de entenderse, sobrellevarse, respetarse y aceptarse, y por eso para que todo pueda fluir y desarrollarse con normalidad, en una reunión de trabajo, en un blog de internet o en un grupo de amigos, en incluso familiar, lo mejor es dejar la política fuera.
Pero hoy es un día, especial, ayer tuvimos Elecciones Generales y ahora esperamos se forme un nuevo gobierno que tenga que regir los destinos de nuestro país, durante los próximos cuatro años.
Es un poco complicado porque ninguno de los partidos que se han presentado a la elección ha conseguido mayoría suficiente para gobernar, por si solo. Lo único que ahora hay que desear es que la responsabilidad de los políticos tenga en cuenta en sus decisiones los intereses de cada uno de nosotros y consigan un acuerdo de gobierno estable y firme para poder llevarnos por el camino de la recuperación, de la creación de empleo estable y digno y que sean capaces de encontrar acuerdos importantes en educación, sanidad y derechos sociales que hagan que los más necesitados recuperen su alegría de vivir y un futuro digno y estable para sus familias.
No se debe de hablar hoy de ganar o perder, se debe de hablar de soluciones, de regeneración democrática, de tolerancia y de participación para que entre todos seamos capaces de purificar esta democracia nuestra, que adolece de grandes defectos y de mejorarla con lo cual todos nos podemos considerar ganadores y necesarios, desde hoy, para alcanzar esas metas.
A si que yo desde aquí felicito a todos mis compatriotas porque, una vez más, ha ganado la democracia y por tanto con ella todos los demócratas, y a partir de hoy entre todos debemos ayudar a los que nos manden para que puedan ir mejorado nuestra vida y nuestro futuro llevando a nuestro país a mejores cotas de desarrollo, de bienestar y de progreso. Y todo ello hay que conseguirlo con un clima de estabilidad, de calma y de respeto, que es fundamental para que todos nos sintamos a gusto y para que todos nos sintamos importantes y necesarios en el empeño.
Felicidades a todos porque ayer ganamos los españoles.