CUÁNDO
Me decido hoy a escribir sobre la poca gana de formar gobierno que tienen algunos de nuestros políticos, que están abusando de nuestra voluntad y hasta de nuestras ideas negándose a hacer lo que es su obligación y su trabajo, facilitar la gobernabilidad y normalidad democrática de nuestro país.
Aquí hubo unas elecciones y ganó un partido. El pueblo otorgó el mayor número de votos al PP. Con todos los defectos, que los tiene sin duda, los españoles valoraron la gestión económica de este partido y le hacen el ganador de las elecciones. Sin embargo los partidos niegan su apoyo a la decisión de las urnas y nos llevan, con su negativa y su no conseguida intentona de un cambio a la izquierda, a unas nuevas elecciones generales.
Se celebran ambas, como siempre pagados por nosotros, y el resultado es que todos los partidos de ámbito nacional pierden votos excepto el PP que vuelve a ganar las elecciones con más margen que las primeras. Y está clarísimo para todos menos para los líderes que los ciudadanos han decidido que lo que quieren es un gobierno presidido por el PP.
Bueno pues ahora esos que deberían, por el bien del país, haber formado gobierno en Diciembre, en las primeras, siguen pensando, absurda mente en ellos, y nos van a llevar casi seguro a unas terceras elecciones que supondrían en total, las tres, un gasto de más de 500.000.000 de € o sea la friolera de 83.000.000.000 millones de pesetas. Y después creéis vosotros que esto se iba a arreglar, esto que no tendría parangón en la Europa democrática, nos llevaría a ser el hazmerreír de todos y a nosotros nos llevaría a un retroceso económico impredecible y a la ingobernabilidad de nuestro país en el tiempo.
Al final nos han hecho soportar dos elecciones autonómicas para ver si esto les aclaraba las ideas, pues los resultados no pueden ser más convincentes.
Esto es una realidad que no deberíamos consentir porque nosotros no lo merecemos y ellos son los que con su irresponsabilidad y su ineficacia están poniendo en peligro la democracia y la libertad. Ya está bien de que pongan sus intereses particulares por encima de los de todos los españoles. En democracia las urnas mandan y lo políticos lo que tienen que hacer es cumplir rápida y fielmente ese mandato. Así que un gobierno ya.
Me decido hoy a escribir sobre la poca gana de formar gobierno que tienen algunos de nuestros políticos, que están abusando de nuestra voluntad y hasta de nuestras ideas negándose a hacer lo que es su obligación y su trabajo, facilitar la gobernabilidad y normalidad democrática de nuestro país.
Aquí hubo unas elecciones y ganó un partido. El pueblo otorgó el mayor número de votos al PP. Con todos los defectos, que los tiene sin duda, los españoles valoraron la gestión económica de este partido y le hacen el ganador de las elecciones. Sin embargo los partidos niegan su apoyo a la decisión de las urnas y nos llevan, con su negativa y su no conseguida intentona de un cambio a la izquierda, a unas nuevas elecciones generales.
Se celebran ambas, como siempre pagados por nosotros, y el resultado es que todos los partidos de ámbito nacional pierden votos excepto el PP que vuelve a ganar las elecciones con más margen que las primeras. Y está clarísimo para todos menos para los líderes que los ciudadanos han decidido que lo que quieren es un gobierno presidido por el PP.
Bueno pues ahora esos que deberían, por el bien del país, haber formado gobierno en Diciembre, en las primeras, siguen pensando, absurda mente en ellos, y nos van a llevar casi seguro a unas terceras elecciones que supondrían en total, las tres, un gasto de más de 500.000.000 de € o sea la friolera de 83.000.000.000 millones de pesetas. Y después creéis vosotros que esto se iba a arreglar, esto que no tendría parangón en la Europa democrática, nos llevaría a ser el hazmerreír de todos y a nosotros nos llevaría a un retroceso económico impredecible y a la ingobernabilidad de nuestro país en el tiempo.
Al final nos han hecho soportar dos elecciones autonómicas para ver si esto les aclaraba las ideas, pues los resultados no pueden ser más convincentes.
Esto es una realidad que no deberíamos consentir porque nosotros no lo merecemos y ellos son los que con su irresponsabilidad y su ineficacia están poniendo en peligro la democracia y la libertad. Ya está bien de que pongan sus intereses particulares por encima de los de todos los españoles. En democracia las urnas mandan y lo políticos lo que tienen que hacer es cumplir rápida y fielmente ese mandato. Así que un gobierno ya.