LA LOTERIA
Es la lotería, en sus diversas formas, la ilusión de millones de personas que piensan solucionar todos sus problemas económicos con un buen premio que le asegure su bienestar, y el de su familia, para toda la vida.
Es obvio que solo un reducido número de jugadores de esos millones de participantes lo consiguen, otros muchos que caen en la ludopatía, o sea el vicio del juego, se arruinan totalmente y el esto nunca llegan a alcanzar el ansiado premio pero estos, que encima juegan pequeñas cantidades, tienen en el juego una ilusión diaria que si no le aporta ninguna ayuda económica si que mantiene encendida esa llama de esperanza de que un día llegará el soñado premio.
Hay que decir que en esto de los juegos de azar la suerte aporta un factor determinante y una gran ventaja que solo tienen esos que son favorecidos con ella reiteradamente sin tener que poseer alguna condición u característica especial, sino solo esa, de que la suerte les visite de vez en cuando.
Yo soy uno de esos que nunca recibirán el favor de la diosa fortuna porque es tan escasa mi suerte en el juego que cuando compro un número de lotería, de primitiva o bonoloto, no sale ni siquiera una sola cifra numérica de las que llevaba mi boleto. Pero no obstante yo cada noche cuando voy a comprobar mi ansiada suerte, aunque no tengo la más mínima probabilidad de que me toque, sin embardo siento unos momentos de emoción y de ilusión que nada más por eso merece la pena jugar.
Por eso yo soy un jugador muy tacaño pero tengo establecido una forma que me permite tener ilusión cada día de la semana,, y el procedimiento es el siguiente, compro una apuesta de Primitiva, de bonoloto, de euromillones y del gordo de la primitiva para cada día de la semana y así por 11.50 € aseguro tener ilusiones cada día. Jamás compro quinielas pues no soy muy aficionado al fútbol, solo en Navidad compro lotería porque entiendo que donde el premio puede ser mayor es en este tipo de loterías diarias y porque además resulta más económico.
Se que la lotería a mi no me va a tocar nunca, porque para esto no tengo ninguna suerte pero, y lo bien que me lo paso cada día cuando voy a comprobarlo en mi ordenador, esa es mi suerte, porque de ilusión también se vive. SUERTE PARA TODOS EL 22.
Es la lotería, en sus diversas formas, la ilusión de millones de personas que piensan solucionar todos sus problemas económicos con un buen premio que le asegure su bienestar, y el de su familia, para toda la vida.
Es obvio que solo un reducido número de jugadores de esos millones de participantes lo consiguen, otros muchos que caen en la ludopatía, o sea el vicio del juego, se arruinan totalmente y el esto nunca llegan a alcanzar el ansiado premio pero estos, que encima juegan pequeñas cantidades, tienen en el juego una ilusión diaria que si no le aporta ninguna ayuda económica si que mantiene encendida esa llama de esperanza de que un día llegará el soñado premio.
Hay que decir que en esto de los juegos de azar la suerte aporta un factor determinante y una gran ventaja que solo tienen esos que son favorecidos con ella reiteradamente sin tener que poseer alguna condición u característica especial, sino solo esa, de que la suerte les visite de vez en cuando.
Yo soy uno de esos que nunca recibirán el favor de la diosa fortuna porque es tan escasa mi suerte en el juego que cuando compro un número de lotería, de primitiva o bonoloto, no sale ni siquiera una sola cifra numérica de las que llevaba mi boleto. Pero no obstante yo cada noche cuando voy a comprobar mi ansiada suerte, aunque no tengo la más mínima probabilidad de que me toque, sin embardo siento unos momentos de emoción y de ilusión que nada más por eso merece la pena jugar.
Por eso yo soy un jugador muy tacaño pero tengo establecido una forma que me permite tener ilusión cada día de la semana,, y el procedimiento es el siguiente, compro una apuesta de Primitiva, de bonoloto, de euromillones y del gordo de la primitiva para cada día de la semana y así por 11.50 € aseguro tener ilusiones cada día. Jamás compro quinielas pues no soy muy aficionado al fútbol, solo en Navidad compro lotería porque entiendo que donde el premio puede ser mayor es en este tipo de loterías diarias y porque además resulta más económico.
Se que la lotería a mi no me va a tocar nunca, porque para esto no tengo ninguna suerte pero, y lo bien que me lo paso cada día cuando voy a comprobarlo en mi ordenador, esa es mi suerte, porque de ilusión también se vive. SUERTE PARA TODOS EL 22.