Sabia conclusión amigo Juan 217. No se puede pedir algo que no se puede dar. Ni se puede comer el coco a la gente y mucho menos a los niños con promesas totalmente imposibles Mas aun enfrentarse a un país, a un Rey, a un Gobierno, a una Constitución, y hasta a las fuerzas del orden público, convirtiéndose en delincuentes para luego cuando la justicia les juzga emprender una especia de guerra de guerrillas que lo único que consiguen es aumentar el número de delitos y de delincuentes y sembrar el desorden, el caos en las calles, el deterioro de la convivencia y de la economía en su propia casa. Todo para nada como tú muy bien demuestras en tu conclusión si algún día se consiguiera esa imposible independencia habría que conceder la independencia de todos, capitales, pueblos, barrios, familias e individuos. O sea solo que daría al final independencia. Un saludo