NAVIDAD SIN NIEVE...

NAVIDAD SIN NIEVE
Siempre se ha identificado la Navidad con un paisaje en el que era imprescindible la nieve que cubría con su inmaculado manto ese Belén tradicional que nos llenaba de ilusión y de esperanza, que acercaba el amor a los hogares y el espíritu de solidaridad, ayuda y generosidad, hacia todos los que más necesitaban de ese amor y de esa protección.
¿Pero no habéis notado que la nieve no ha abandonado totalmente? Bueno yo digo esto lógicamente refiriéndome a nuestro pueblo, Fuensanta, cuando yo recuerdo navidades e inviernos donde la nieve llagaba a alcanza alturas en la calle de 40 ó 50 ctms. A veces había que retirar con palas, de la puerta de la calle, la nieve, para poder hacer un camino que nos dejara salir de casa.
Es innegable que la Tierra está sufriendo un calentamiento general, que nosotros no estamos ayudando mucho a erradicar, porque intereses internacionales de tipo económico no hacen ningún caso de las advertencias que los científicos nos hacen sobre este asunto y la capa de ozono más que repararla lo que hacemos es ir poniéndola cada vez peor. Suponiendo que ese sea el único motivo que nos empuja al calor porque desde luego siempre han existido los desiertos y nosotros estamos al sur y muy cerca de los del Sahara.
Qué queréis que os diga, a mi me encantaban aquellos fríos del invierno, esas nevadas abundantes que nos tenían dos o tres días en casa, sin poder ir a la escuela, haciendo bolas de nieve por las calles para lanzárselas a los amigos, porque aquello, cuando se producía por estas fechas, si que era una auténtica Navidad.
Yo recuerdo que cuando caía una nevada, los jóvenes, hacían unas bolas inmensas que aumentaban de tamaño a medida que le iban dando vueltas y de esta manera, cuando llegaban a ser tan grandes que necesitaban varias personas para poderlas mover, las ponían delante de un bar, una tienda o una casa particular, y exigían un aguinaldo para quitarlas de allí porque desde luego les tapaban totalmente la salida al exterior.
A mi me gustaría que se cuidara mas la Naturaleza, que sintiéramos más responsabilidad, en general, ante lo mucho que nos jugamos con el futuro y por supuesto a mí me gustaría ver más a menudo, y con más intensidad, caer esos copos inmaculados de nieve del cielo.
FELIZ NAVIDAD AUNQUE SEA SIN NIEVE