Gracias Triana por tu comentario y por leerme, esto...

JOSÉ MALAGÓN AGUAYO
Hace ya más de 5 años que se nos fue este insigne fuensanteño, en el confluían una serie de virtudes y valores que seria muy difícil enumerar todos ellos porque seguro que me quedaría corto, pero como mi amistad con él fue tan intensa, porque en su infancia y adolescencia más que un amigo para mi, era un hermano pequeño, hoy una vez más calmado tras aquellos dos sucesos que a todos los que le conocíamos nos impactaron, como fue la muerte del matrimonio con tan solo unos días de diferencia, le envío este epitafio que les dediqué tan solo dos días después de su muerte.
A MI AMIGO JOSÉ MALAGÓN
Eras muy niño y ya trabajabas
siempre contento e ilusionado,
alegre y feliz nos enseñabas
a creer en aquel futuro deseado.
Tuviste la amistad como estandarte
que siempre con orgullo defendiste
allí donde tuviste que marcharte
y donde tantos amigos conseguiste.
Catalán que tuviste que adoptar
aunque tú solo eras fuensanteño
cosa que supiste demostrar
a lo largo de tu vida con empeño
Eras además un gran creyente
y de niño monaguillo aplicado
seguiste de mayor asiduamente
visitando a Jesús resucitado.
El amor a tu esposa te llevó
en unos días a reposar junto a ella
dando un gran ejemplo que tornó
tanto dolor en una cosa bella.
Tu hija puede estar orgullosa
de los padres que le correspondieron
y no dude que su obra gloriosa
los ha llevado unidos al Cielo.
A mi amigo Malagón y Sra que Dios tenga en su Santa Gloria DD. EE. PP.
M. Lara 2/02/2018-2023

D. Manuel, dicen que de amor también se muere, según tu mensaje así debió de ser. Que Dios los tenga a su lado. D. E. P.

Saludos cordiales.

Gracias Triana por tu comentario y por leerme, esto fue efectivamente una muerte de amor. Cordial saludo
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Se muere mas de hambre que de amor, porque la mancha de la mora
con otra verde se quita.