Unos niños muy innovadores los de Ciruelos del Pinar (Guadalajara) de los que formé parte un lejano día ya. Muchas tardes cantábamos en la plaza la canción de los esqueletos y lo pasábamos pipa.
LOS ESQUELETOS
Cuando el reloj marca la una,
los esqueletos salen de la tumba.
Tumba, tumba, catatumba.
Cuando el reloj marca las dos,
los esqueletos, comen arroz,
tumba, tumba, catatumba.
Cuando el reloj marca las tres,
los esqueletos toman café,
tumba, tumba, catatumba,
Cuando el reloj marca las cuatro,
los esqueletos se atan el zapato,
tumba, tumba, catatumba.
Cuando el reloj, marca las cinco,
los esqueletos pegan un brinco.
tumba, tumba, catatumba.
Cuando el reloj marca las seis,
los esqueletos se ponen el jersey.
tumba, tumba, catatumba.
Cuando el reloj, marca las siete,
los esqueletos se pegan un cachete.
tumba, tumba, catatumba.
Cuando el reloj, marca las ocho,
los esqueletos se comen un bizcocho.
tumba, tumba, catatumba.
Cuando el reloj, marca las nueve,
los esqueletos ya no se mueven.
tumba, tumba, catatumba.
Cuando el reloj, marca las diez,
los esqueletos ya no se ven.
(Mientras cantábamos haciámos lo que la canción decía. Cuando el reloj marcaba las diez, nos escondíamos baja la barbacana de la plaza y nos hacíamos los muertos un rato largo.)
LOS ESQUELETOS
Cuando el reloj marca la una,
los esqueletos salen de la tumba.
Tumba, tumba, catatumba.
Cuando el reloj marca las dos,
los esqueletos, comen arroz,
tumba, tumba, catatumba.
Cuando el reloj marca las tres,
los esqueletos toman café,
tumba, tumba, catatumba,
Cuando el reloj marca las cuatro,
los esqueletos se atan el zapato,
tumba, tumba, catatumba.
Cuando el reloj, marca las cinco,
los esqueletos pegan un brinco.
tumba, tumba, catatumba.
Cuando el reloj marca las seis,
los esqueletos se ponen el jersey.
tumba, tumba, catatumba.
Cuando el reloj, marca las siete,
los esqueletos se pegan un cachete.
tumba, tumba, catatumba.
Cuando el reloj, marca las ocho,
los esqueletos se comen un bizcocho.
tumba, tumba, catatumba.
Cuando el reloj, marca las nueve,
los esqueletos ya no se mueven.
tumba, tumba, catatumba.
Cuando el reloj, marca las diez,
los esqueletos ya no se ven.
(Mientras cantábamos haciámos lo que la canción decía. Cuando el reloj marcaba las diez, nos escondíamos baja la barbacana de la plaza y nos hacíamos los muertos un rato largo.)
Carmen, ¡la canción infantil es realmente encantadora y divertida!
La voy a copiar porque me ha gustado mucho.
Saludos.
La voy a copiar porque me ha gustado mucho.
Saludos.