Con la prostitución no se puede. La prostitución no es denigrante en tiempos de bonanza porque cumple una función, en mi opinión, muy importante. Lo que si es denigrante es, que un ser humano tenga que degradarse para poder alimentar a su familia en tiempos como los actuales. Y cuando digo denigrante, también me refiero a quienes se prostituyen por dinero en política