Veo con estupor que uno de los temas de actualidad este verano, es la idea del siniestro Arnaldo Otegui, de presentarse para Leendakari, no encuentro palabras para describir la osadía de este individuo, que por su cara, está encantado de haberse conocido, ya solo falta que con el dinero de todos los españoles hubiera que pagar a este facineroso, siento que no haya unanimidad entre nuestros políticos para aislar estas conductas que tanto dañó y por tantos años han causado a la ciudadanía en general y a las víctimas en particular, mi solidaridad para ellas.