LA TELEVISION.
Pocos años llevaba la TVE. en nuestro País, cuando el que hoy es mi marido hizo un viaje que antes se llamaba paso del ecuador a Madrid, para visitar los estudios de TV, que entonces se encontraban en el paseo de la Habana; como por aquellos días yo me encontraba “por casualidad” en dicha ciudad, me uní al grupo, para ver los estudios, no sé qué esperaríamos encontrar, pero nos llevamos una gran decepción, unas habitaciones destartaladas con grandes cajas de embalaje por medio y poco mas, ningún estudio maravilloso, si lo había, no nos lo enseñaron,) aunque tiempo después he oído comentarios sobre la precariedad de los primeros tiempos, que coincidían con lo que yo recuerdo.
Este medio de comunicación, fue una revolución; era casi mágico ver las imágenes a través de la pantalla. Como todas las familias no la tuvieron al mismo tiempo en sus casas, se iba a casa de los vecinos (invitados por ellos claro está) a ver las series del momento, yo recuerdo haber visto de ocupa el fugitivo y algunos episodios de Bonanza.
Como anécdota, recuerdo que una vez que había toros, en el bar, frente a mi casa, mi padre que estaba a la puerta, vio salir muy de prisa a una vecina mayor, era muy salerosa, y la pregunta, ¿dónde va con tanta prisa, señora Cayetana? Contesta: --- a mí ese no me coge, ¡está listo ¡--- extrañado le dice --- ¿a quién se refiere? --- ¿a quién va a ser? --- ¡a el toro hombre ¡sería de esas veces que el bicho se ve en primer plano, parece un chiste, pero no lo es. Hay que ponerse en aquella época y personas que no habían ido nunca al cine,
Había gran calidad en la programación de entonces, yo recuerdo ver obras de Dostoievski: Los Hermanos Karmazov, el idiota y alguna más, y de León Tolstoi: Guerra y Paz, Crimen y Castigo, Anna Karenína. También obras de Alan Poe, con el barril de amontillado, el cuervo, El Clavo. Yo creo que lo presentaba Chicho Ibáñez, aunque eran de miedo, yo no perdía ni una, y las obras de teatro del actor e inolvidable, Buero Vallejo, El tragaluz, En la ardiente oscuridad, y muchas más y qué decir de las obras de Armiñan, de Forqué, y tantos otros; y los estudio 1, una vez por semana, lo que se dice una TV. al servicio de la cultura, y el entretenimiento, los fines de semana, llevaban a los cantantes del momento; nada que ver con lo que se hace ahora, con tantas cadenas, que se copian unas a otras, en las tertulias y en los cotilleos.
De los actores, también guardo un buen recuerdo, estoy hablando de un pequeño pueblo, donde la tv. fue una ventana abierta al mundo, un invento maravilloso.
Pocos años llevaba la TVE. en nuestro País, cuando el que hoy es mi marido hizo un viaje que antes se llamaba paso del ecuador a Madrid, para visitar los estudios de TV, que entonces se encontraban en el paseo de la Habana; como por aquellos días yo me encontraba “por casualidad” en dicha ciudad, me uní al grupo, para ver los estudios, no sé qué esperaríamos encontrar, pero nos llevamos una gran decepción, unas habitaciones destartaladas con grandes cajas de embalaje por medio y poco mas, ningún estudio maravilloso, si lo había, no nos lo enseñaron,) aunque tiempo después he oído comentarios sobre la precariedad de los primeros tiempos, que coincidían con lo que yo recuerdo.
Este medio de comunicación, fue una revolución; era casi mágico ver las imágenes a través de la pantalla. Como todas las familias no la tuvieron al mismo tiempo en sus casas, se iba a casa de los vecinos (invitados por ellos claro está) a ver las series del momento, yo recuerdo haber visto de ocupa el fugitivo y algunos episodios de Bonanza.
Como anécdota, recuerdo que una vez que había toros, en el bar, frente a mi casa, mi padre que estaba a la puerta, vio salir muy de prisa a una vecina mayor, era muy salerosa, y la pregunta, ¿dónde va con tanta prisa, señora Cayetana? Contesta: --- a mí ese no me coge, ¡está listo ¡--- extrañado le dice --- ¿a quién se refiere? --- ¿a quién va a ser? --- ¡a el toro hombre ¡sería de esas veces que el bicho se ve en primer plano, parece un chiste, pero no lo es. Hay que ponerse en aquella época y personas que no habían ido nunca al cine,
Había gran calidad en la programación de entonces, yo recuerdo ver obras de Dostoievski: Los Hermanos Karmazov, el idiota y alguna más, y de León Tolstoi: Guerra y Paz, Crimen y Castigo, Anna Karenína. También obras de Alan Poe, con el barril de amontillado, el cuervo, El Clavo. Yo creo que lo presentaba Chicho Ibáñez, aunque eran de miedo, yo no perdía ni una, y las obras de teatro del actor e inolvidable, Buero Vallejo, El tragaluz, En la ardiente oscuridad, y muchas más y qué decir de las obras de Armiñan, de Forqué, y tantos otros; y los estudio 1, una vez por semana, lo que se dice una TV. al servicio de la cultura, y el entretenimiento, los fines de semana, llevaban a los cantantes del momento; nada que ver con lo que se hace ahora, con tantas cadenas, que se copian unas a otras, en las tertulias y en los cotilleos.
De los actores, también guardo un buen recuerdo, estoy hablando de un pequeño pueblo, donde la tv. fue una ventana abierta al mundo, un invento maravilloso.
Hola Rosalía, buen relato.
Mi primera memoria de la TV la tengo de finales de 1960 cuando televisaron la boda de Balduino y Fabiola. Todo un acontecimiento.
En mi pueblo la única tele la tenía el veterinario.
Poco tiempo después, el cura montó un teleclub, pero yo ya estaba en el colegio en Zamora.
Mi primera memoria de la TV la tengo de finales de 1960 cuando televisaron la boda de Balduino y Fabiola. Todo un acontecimiento.
En mi pueblo la única tele la tenía el veterinario.
Poco tiempo después, el cura montó un teleclub, pero yo ya estaba en el colegio en Zamora.
Yo la idea que tengo es sobre los 60 y en concreto recuerdo, coros y danzas, que lo presentaba Jesús Álvarez, el padre del actual, del mismo nombre. pero más guapo. El recuerdo más viví, aunque ya habían pasado algunos años, fue la llegada del hombre a la Luna, que lo dieron a las tres de la mañana, y por supuesto me levanté a verlo.