Paco, por supuesto, no volvería a decir ni fu. Recuerda: A un burro le hacían obispo y lloraba.
El perdón conlleva arrepentimiento, o un apretón de manos, o un beso en la mejilla de una mujer.
El perdón conlleva arrepentimiento, o un apretón de manos, o un beso en la mejilla de una mujer.
Todos los católicos de derechas están en pecado
¡Lárgate con viento freso a la sierra, ¡mangurrián! y luego vas y te confiesas que ahora todos los socialcomunistas habéis vuelto al redil!