Paco tú sabes que NO me refiero a esos. Pero si alguno...

Las leyes que sacan cadáveres de represaliados, agrandan la historia de los pueblos y sus gentes. Quienes oculta la verdad siempre es porque temen que se vea la realidad

Hola Olimpio, buenas tardes. No sé si cuando hablas de todos esos cadáveres de represaliados te estás refiriendo en parte a estos.
No recuerdo muy bien, si esto venía en uno de los libros del franquista Pío Moa. Por lo cual, no podemos saber si todo esto es cierto.
Saludos y buenas tardes.

Marx, padre del comunismo y autor intelectual de sus desmanes, ya había señalado desde el principio, cuál era el objetivo, el enemigo a abatir, el chivo expiatorio que debía encauzar las iras del populacho que se sumara a su criminal doctrina política.
Y lo enunció con una de esas frases grandilocuentes, con las que tan fácilmente se embauca a los que no tienen formación suficiente como para saber que le están manipulando: “La Religión es el opio del pueblo”.
En España, la Iglesia Católica, ha sido siempre objetivo de las iras de la extrema izquierda, a pesar de que la mayor parte de la Asistencia Social del Siglo XX, sea obra Religiosa y de que cientos de miles de hijos de obreros y campesinos, aprendieron a leer y escribir gracias a las obras pías.
Pero centrémonos solamente en el periodo republicano. Tres han sido las oleadas principales de asesinatos y ataques contra la Iglesia Católica y todo lo que siempre ha representado en España.
El primero se produjo cuando la Segunda República no había cumplido todavía un mes, o sea entre el 10 y 13 de mayo de 1.931.
En Madrid, la extrema izquierda más radical, sobre todo socialistas, comunistas y anarquistas, desencadenó una oleada de ataques contra religiosos y contra edificios de la Iglesia.
En estos tres días, 18 religiosos y empleados de los centros atacados murieron en los disturbios, 6 de ellos quemados. Cien edificios fueron destruidos por las llamas, entre ellos: Iglesias, Bibliotecas, Residencias, Asilos y Centros de Beneficencia, y resultó destruida o dañada una importante parte del patrimonio artístico y cultural que albergaban los Centros atacados. Entre ellos, los más de 100.000 libros de la Biblioteca de los Jesuitas de Madrid.
La segunda tanda de asesinatos de religiosos, la encontramos en la Revolución de octubre de 1.934, en Asturias. Allí, fueron asesinados y torturados 34 religiosos, además de la destrucción de importantes obras de arte del patrimonio español, sumándose un total de 58 edificios religiosos incendiados.
Pero las mayores brutalidades se cometieron en la localidad de Turrón, donde los nueve religiosos que atendían las Escuelas Cristianas, fueron torturados y finalmente asesinados. En el Seminario de Oviedo, fueron asesinados seis seminaristas de entre 18 y 21 años. En muchas y más pequeñas localidades, también se cometieron atroces asesinatos, por ejemplo en la localidad de Rebolledo, donde el Párroco fue asesinado a culetazos de escopeta, o en Valdecuna, donde el Párroco fue asesinado tras sufrir mutilaciones. O en Mieres, donde dos novicios pasionistas fueron ahogados en el río.
Pero la Gran Matanza de Religiosos y cristianos, se produjo durante la Guerra Civil. En la zona que se encontraba bajo el control del Frente Popular: Fueron asesinados 6.832 Religiosos, además de 3.911 seglares y casi 1.000 seminaristas. Un total de 11.743 personas asesinadas, que murieron tras haber sufrido torturas aberrantes. En Madrid, por ejemplo, varios sacerdotes fueron echados vivos a las jaulas de los leones que había en la Casa de Fieras del Parque del Retiro. En Camuñas, Toledo, tres sacerdotes fueron arrojados vivos a un pozo de 30 metro, y después se lanzaron encima de ellos, objetos pesados para aplastarlos cuando aún estaban vivos.
De las 390 religiosas asesinadas, la mayoría fueron violadas antes de morir. Y así, hasta casi los 12.000 casos, que están perfectamente documentados.
Entre los 6.832 religiosos, 4.184 eran sacerdotes, y 13 obispos.

Paco

Paco tú sabes que NO me refiero a esos. Pero si alguno quedará en las cunetas también.

Me refiero a todos, aquellos que fueron asesinados durante y después de la guerra por pensar de forma diferente al régimen franquista.
Los demás ya habían sido sacados y enterrados donde sus familiares indicaron. Pero, lo repito a todos los que queden para que esas cifras que das sean correctas.
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
D. LIMPIO, siempre estás con la misma canción, habla de los tuyos.