Hola, amigos. Me llega hoy un correo sobre Franco con nuevos aportes del corresponsal FERISA. Estoy casi completamente de acuerdo con él, menos en un "detalle": se le va un poco la mano en decir que no se trató de una guerra civil. Aunque fuera más bien "incivil", tres años de lucha armada entre dos ejércitos que ocupaban inicialmente territorios parejos con fuerzas parejas, justifican la clásica denominación histórica, que no se puede negar. Y aunque haya invitaciones al olvido y a la desmemoria histórica, yo creo que hay que diferenciar ésta del odio y el rencor. Lucharemos por mantener una verdad que con el tiempo se ha ido esclariendo más y más; sin odio, pero con claridad, decisión, argumentos y valentía. Los que van contra ese deseo de que las cosas queden claras, lean la obra de PAUL PRESTON, "El holocausto español", y luego hablamos. El Supremo logró acallar la voz de Baltasar Garzón, con lo de las escuchas de la trama Gürtel, pero su verdadero propósito era silenciar a un investigador memorioso e incómodo de los desastres de nuestra Guerra Civil. No hace mucho le solicité al historiador Ángel Viñas, por este mismo medio, me ampliara información sobre la muerte del general Amado Balmes, en Las Palmas, el 17 de julio del 36, y me confirmó que efectivamente se trató del asesinato de una figura que hubiera podido poner obstáculos al alzamiento de Franco, ya que no era partidario del mismo. La saña de Franco llegó hasta la negación de la pensión a su viuda... En fin, son solo ejemplos de cómo se pueden aclarar cosas con el tiempo, de manera que la visión histórica de los hechos responda mejor a la verdad.
Por mi parte, no tengo duda de que esa guerra "incivil", fue la peor tragedia que le pudo ocurrir a nuestro país en toda su historia y que esa tragedia fue provocada conscientemente por Franco y su cáfila de generales africanistas. FRANCISCO TOSTÓN DE LA CALLE
Por mi parte, no tengo duda de que esa guerra "incivil", fue la peor tragedia que le pudo ocurrir a nuestro país en toda su historia y que esa tragedia fue provocada conscientemente por Franco y su cáfila de generales africanistas. FRANCISCO TOSTÓN DE LA CALLE