Hola, amigos. No sé si lamentar o agradecer que de vez en cuando vuelvan a sacar el tema de Franco. No me agrada, pero como todos los días sale de una manera o de otra, especialmente cuando se habla de la memoria histórica, pues volvamos. Como ya he señalado en alguna otra oportunidad, los que tienen el poder en la actualidad no se descuidan y tratan de recontar la historia a su manera y si pudieran, volverían a levantar las estatuas de Franco, los nombres de calles y avenidas y los himnos y cánticos de "aquella gesta heróica". Gracias a los contertulios, he recordado dos cosas: el talante del general Queipo de LLano, desalmado, revanchista, bravucón y sanguinario en la represioón por buena parte de Andalucía. Pero fíjense: el señor Gallardón volvió a resucitar el título de marqués para uno de sus sucesores. ¿Lo quieren más claro? Del mismo estilo era el general Franco, a quien Queipo de Llano llamaba "Paca, la culona". Así era también Franco: frío, calculador, vengativo e implacabale para con los enemigos, no de la patria, sino de su desmedida ambición, que tuvimos que soportar durante 40 años. Ni creó estructuras de progreso, salvo los embalses, dicho sea en su honor; ni fue capaz de enfrentarse a unas elecciones libres: (¿no decía que los españoes lo querían tanto?). Cosa que sí fue capaz de enfrentar Pinochet, que no se le quedó atrás en lo sanguinario.
El otro punto de reflexión, que debo a FERISA, es que el rey Juan Carlos debe su corona a Franco y es una corona, por tanto, espúria, porque el régimen que nació el 18 de julio del 36, nunca fue un gobierno legítimo sino de fuerza. Está pendiente, por tanto, un referendum en el que los españoles, que son la fuente del poder y no la dictadura franquista, digan si quieren monarquía o no.
Cordial Saludo. Francisco Tostón de la Calle
El otro punto de reflexión, que debo a FERISA, es que el rey Juan Carlos debe su corona a Franco y es una corona, por tanto, espúria, porque el régimen que nació el 18 de julio del 36, nunca fue un gobierno legítimo sino de fuerza. Está pendiente, por tanto, un referendum en el que los españoles, que son la fuente del poder y no la dictadura franquista, digan si quieren monarquía o no.
Cordial Saludo. Francisco Tostón de la Calle