Continuación.
Hubo un férreo control de los medios de comunicación a través de ciertos mecanismos como la censura. Las nuevas autoridades se propusieron erradicar todo vestigio de liberalismo y democracia. LA REPRESIÓN que padecieron los vencidos fue implacable cortando de raíz cualquier disidencia. Se dictaron sentencias de muerte, penas de cárcel (yo vivía frente a la cárcel y raro era el día en que no veíamos columnas de presos, venían trasladados a la cárcel de León), condenas a campos de concentración o trabajos forzados. También se procedió a la depuración (separación de sus empleos) de funcionarios y trabajadores considerados contrarios al Movimiento Nacional. Las penas fueron muy severas. La represión costó la vida a más de 50 000 españoles después del 1 de abril de 1939.
(Continuará).
Hubo un férreo control de los medios de comunicación a través de ciertos mecanismos como la censura. Las nuevas autoridades se propusieron erradicar todo vestigio de liberalismo y democracia. LA REPRESIÓN que padecieron los vencidos fue implacable cortando de raíz cualquier disidencia. Se dictaron sentencias de muerte, penas de cárcel (yo vivía frente a la cárcel y raro era el día en que no veíamos columnas de presos, venían trasladados a la cárcel de León), condenas a campos de concentración o trabajos forzados. También se procedió a la depuración (separación de sus empleos) de funcionarios y trabajadores considerados contrarios al Movimiento Nacional. Las penas fueron muy severas. La represión costó la vida a más de 50 000 españoles después del 1 de abril de 1939.
(Continuará).
CONTINUACIÓN.
Cuando estalló la Segunda Guerra Mundial, Franco, a pesar de sus estrechos vínculos con el EJE, dada la vital ayuda nazi recibida en la Guerra Civil, tuvo que adoptar una posición de neutralidad por necesidad, como resultado de la extrema debilidad material y militar en que había quedado sumido el país, incluso soldados famélicos, hambrientos por esos años de guerra. No obstante, a raíz de los triunfos de Hitler en Europa, Franco osciló hacia una posición más favorable a la intervención. Aprovechando que las tropas alemanas que ocuparon París, tropas franquistas ocuparon la ciudad internacional de Tánger en junio de 1940.
Franco se entrevistó con Hitler en Hendaya en octubre de 1940 y pocos meses después también con Mussolini. En la famosa entrevista en Hendaya. Franco manifestó su disposición a entrar en la contienda bélica si Alemania le ofrecía como contrapartida el cumplimento de sus objetivos imperiales.
Mañana veremos lo que pedía Franco para que España entrara en combate... ¡Casi nada!
El jefe es el jefe y los demás, empleados.
Cuando estalló la Segunda Guerra Mundial, Franco, a pesar de sus estrechos vínculos con el EJE, dada la vital ayuda nazi recibida en la Guerra Civil, tuvo que adoptar una posición de neutralidad por necesidad, como resultado de la extrema debilidad material y militar en que había quedado sumido el país, incluso soldados famélicos, hambrientos por esos años de guerra. No obstante, a raíz de los triunfos de Hitler en Europa, Franco osciló hacia una posición más favorable a la intervención. Aprovechando que las tropas alemanas que ocuparon París, tropas franquistas ocuparon la ciudad internacional de Tánger en junio de 1940.
Franco se entrevistó con Hitler en Hendaya en octubre de 1940 y pocos meses después también con Mussolini. En la famosa entrevista en Hendaya. Franco manifestó su disposición a entrar en la contienda bélica si Alemania le ofrecía como contrapartida el cumplimento de sus objetivos imperiales.
Mañana veremos lo que pedía Franco para que España entrara en combate... ¡Casi nada!
El jefe es el jefe y los demás, empleados.