Parece que el debate pierde calidad...
Hay muchos temas para entrar.
Moral viene de "more", se traduce por "costumbre". Es "lo que siempre se ha hecho" en determinado caso. En la legislación actual es importantísima. Primero es la Ley, y detrás manda la costumbre.
Es dictatorial pretender que la asignatura de "Religión" sea obligatoria para todos los escolares y por lo mismo, "Educación para la ciudadanía".
Podemos recordar cómo al obispo Polanco (Teruel) lo asesinaron disparándole poco a poco: una mano, otra, un brazo, un pie..., mientras, él iba haciendo el signo de bendición sobre los que disparaban. También, en Madrid, la monja de 82 años, casi ciega y sorda, que la sacaron del convento y la escondieron en una casa. Vinieron a por ella, la sacaron arrastrándola por las escaleras y en la calle la mataron a tiros.
¿Que buscamos cuando contamos estas cosas?
Si alguno, a propósito, cuenta a los demás algo que no es cierto, no beneficia a nadie, confunde, e impide a los demás la posibilidad de llegar a alguna conclusión.
Se supone que un foro cultural no tiene nada que ver, ni siquiera por casualidad, con un adoctrinamiento hacia la derecha o hacia la izquierda. Perderíamos la objetividad, no llegaríamos a nada, incluso podríamos hasta reñir entre nosotros.
Podemos criticar, y a continuación aportar nuestra solución, siempre con los pies en tierra.
Esto podría acurrir entre españoles actuales que no han tenido que lamentarse de ningún enfrentamiento, que quieren a España y desean que sus hijos vivan y piensen como nosotros, no como los abuelos, que sin ellos quererlo los metieron en la guerra.
Hay muchos temas para entrar.
Moral viene de "more", se traduce por "costumbre". Es "lo que siempre se ha hecho" en determinado caso. En la legislación actual es importantísima. Primero es la Ley, y detrás manda la costumbre.
Es dictatorial pretender que la asignatura de "Religión" sea obligatoria para todos los escolares y por lo mismo, "Educación para la ciudadanía".
Podemos recordar cómo al obispo Polanco (Teruel) lo asesinaron disparándole poco a poco: una mano, otra, un brazo, un pie..., mientras, él iba haciendo el signo de bendición sobre los que disparaban. También, en Madrid, la monja de 82 años, casi ciega y sorda, que la sacaron del convento y la escondieron en una casa. Vinieron a por ella, la sacaron arrastrándola por las escaleras y en la calle la mataron a tiros.
¿Que buscamos cuando contamos estas cosas?
Si alguno, a propósito, cuenta a los demás algo que no es cierto, no beneficia a nadie, confunde, e impide a los demás la posibilidad de llegar a alguna conclusión.
Se supone que un foro cultural no tiene nada que ver, ni siquiera por casualidad, con un adoctrinamiento hacia la derecha o hacia la izquierda. Perderíamos la objetividad, no llegaríamos a nada, incluso podríamos hasta reñir entre nosotros.
Podemos criticar, y a continuación aportar nuestra solución, siempre con los pies en tierra.
Esto podría acurrir entre españoles actuales que no han tenido que lamentarse de ningún enfrentamiento, que quieren a España y desean que sus hijos vivan y piensen como nosotros, no como los abuelos, que sin ellos quererlo los metieron en la guerra.