Cuantas cabezas, tantos paraceres...

Cuantas cabezas, tantos paraceres

Casarme quiero; comeré cabeza de olla y sentarme he primero

Do no hay cabeza raída, no hay cosa cumplida

La cabeza, blanca, y el seso, por venir

Mas vale ser cabeza de ratón que cola de león

Nunca lavé cabeza que no me saliese tiñosa

Quebrásteme la cabeza, y ahora me untas el casco

A cada cabo hay tres leguas de mal quebranto

El que está en muchos cabos, está en ninguno.