Ay, Maricruz
(Rafael de
León - Salvador Valverde y Manuel Quiroga)
Es Maricruz la mocita,
la más bonita
del barrio de Santa Cruz,
el viejo barrio judío,
rosal florío,
clavao en sus rosas de luz.
Y desde la Macarena
la vienen a contemplar,
pues su carita morena
hace a los
hombres soñar.
Y una noche de
luna
el silencio rompió
la guitarra moruna
y una voz que cantó:
¡Ay, Maricruz, Maricruz!,
maravilla de
mujer;
del barrio de Santa Cruz
eres un rojo clavel.
Mi vía sólo eres tú,
y por jurarte yo eso
me diste en la boca un beso
que aún me quema, Maricruz.
¡Ay, Maricruz!, ¡Ay!
¡Ay, Maricruz!
Fue como pluma en el viento
su juramento,
y a su querer traicionó,
de aquellos brazos amantes
huyó una tarde,
y a muchos después se entregó.
Señoritos con dinero
la lograron sin tardar,
y aquel su cuerpo hechicero
hizo a los hombres pecar.
Pero sólo hubo un
hombre
que con pena lloró
recordando su nombre,
esta
copla cantó:
¡Ay, Maricruz, Maricruz!,
maravilla de mujer;
del barrio de Santa Cruz
eres un rojo clavel.
Mi vida sólo eres tú,
y por jurarte yo eso
me diste en la boca un beso
que aún me quema, Maricruz.
¡Ay, Maricruz!, ¡Ay!
¡Ay, Maricruz!.