Ayer se cumplieron diecinueve años del asesinato del socialista Ernest Lluch, por ETA.
>>>>>> Dos tiros en la cabeza. Es lo que hizo falta para acabar con el padre de la sanidad universal española, Ernest Lluch, impulsor de la Ley General de Sanidad. Este miércoles se cumplen 19 años de su asesinato y políticos de todo signo han manifestado en redes sociales su admiración por este trabajador público.
Ocurrió el 21 de noviembre del 2000. Ernest Lluch apareció asesinado entre dos coches en la segunda planta de un parking. El cadáver fue descubierto por un vecino horas después. El político había recibido dos balazos en la cabeza por parte de terroristas de ETA.
La Ley General de Sanidad, impulsada por Lluch, instaló la sanidad pública para todos los españoles y extranjeros residentes en España
Sin tener ninguna formación sanitaria, pues estaba licenciado en Ciencias Políticas, Económicas y Comerciales, Lluch fue capaz de sacar adelante una de las leyes fundamentales del Sistema Nacional de Salud (SNS). La Ley General de Sanidad sentó las bases de la sanidad pública, asegurando la cobertura sanitaria de todos los españoles y de extranjeros residentes en España.
Esta norma dio origen también al Consejo Interterritorial, un organismo fundamental para garantizar una asistencia sanitaria homogénea e igualitaria para los habitantes de todas las regiones españolas. Además, supuso un espaldarazo para el sector investigador en sanidad, pues con ella se produjo el nacimiento del Instituto de Salud Carlos III, que alberga a dos de los principales centros de investigación biomédica europeos: el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) y el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC).
Más allá de sus logros en política sanitaria, Lluch fue un firme defensor de la democracia y la libertad a lo largo de toda su vida. Por ello se granjeó pasar una temporada en la sombra bajo el régimen de Francisco Franco y estar bajo la mirilla de los terroristas de ETA en democracia. >>>>>
>>>>>> Dos tiros en la cabeza. Es lo que hizo falta para acabar con el padre de la sanidad universal española, Ernest Lluch, impulsor de la Ley General de Sanidad. Este miércoles se cumplen 19 años de su asesinato y políticos de todo signo han manifestado en redes sociales su admiración por este trabajador público.
Ocurrió el 21 de noviembre del 2000. Ernest Lluch apareció asesinado entre dos coches en la segunda planta de un parking. El cadáver fue descubierto por un vecino horas después. El político había recibido dos balazos en la cabeza por parte de terroristas de ETA.
La Ley General de Sanidad, impulsada por Lluch, instaló la sanidad pública para todos los españoles y extranjeros residentes en España
Sin tener ninguna formación sanitaria, pues estaba licenciado en Ciencias Políticas, Económicas y Comerciales, Lluch fue capaz de sacar adelante una de las leyes fundamentales del Sistema Nacional de Salud (SNS). La Ley General de Sanidad sentó las bases de la sanidad pública, asegurando la cobertura sanitaria de todos los españoles y de extranjeros residentes en España.
Esta norma dio origen también al Consejo Interterritorial, un organismo fundamental para garantizar una asistencia sanitaria homogénea e igualitaria para los habitantes de todas las regiones españolas. Además, supuso un espaldarazo para el sector investigador en sanidad, pues con ella se produjo el nacimiento del Instituto de Salud Carlos III, que alberga a dos de los principales centros de investigación biomédica europeos: el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) y el Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC).
Más allá de sus logros en política sanitaria, Lluch fue un firme defensor de la democracia y la libertad a lo largo de toda su vida. Por ello se granjeó pasar una temporada en la sombra bajo el régimen de Francisco Franco y estar bajo la mirilla de los terroristas de ETA en democracia. >>>>>