Hola, amigos. Yo me imagino sin mucho esfuerzo, que uno de los engorros más embarazosos es que AZNAR premie a alguno de sus seguidores con el libro ese que publicó. Los malos gobernantes tienen que publicar libros contando todas las mentiras que se les ocurran porque nadie vio las cosas buenas que suelen llenar esos mamotretos insoportables. Algo así ocurrió en mi querida COLOMBIA, con el ladrillo que publicó URIBE contando sus hazañas.