UN CASTELLANO LEAL
Romance I
"Hola, hidalgos y escuderos
de mi alcurnia y mi blasón,
mirad, como bien nacidos,
de mi sangre y casa en pro.
"Esas puertas se defiendan
que no ha de entrar ¡vive Dios!
por ellas, quien no estuviere
más limpio que lo está el sol,
"No profane mi palacio
un fementido traidor
que contra su rey combate
y que a su patria vendió.
Pues si él es de reyes primo,
primo de reyes soy yo,
y conde de Benavente
si él es duque de Borbón.
"Llevándole de ventaja,
que nunca jamás manchó
la traición mi noble sangre,
y haber nacido
español."
Así atronaba la calle
una ya cascada voz,
que de un palacio salía
cuya puerta se cerró;
Y a la que estaba a caballo
sobre un negro pisador,
siendo en su escudo las lises
más bien que timbre, baldón;
Y de pajes y escuderos
llevando un tropel en pos
cubiertos de ricas galas,
el gran duque de Borbón.
El que lidiando en Pavía
más que valiente, feroz,
gozóse en ver prisionero
a su natural señor;
Y que a
Toledo ha venido
ufano de su traición,
para recibir mercedes,
y ver al Emperador.