LAS SENDAS DE LA VIDA

Anoche escuché una voz,
Para mí, muy conocida,
Noté su beso en mis labios,
Y también en mis mejillas.

Con palabras de cariño,
En susurros me decía,
Yo siempre estaré contigo,
Por las sendas de la vida.

No llores por Dios, no llores,
No llores por Dios, mi vida,
Que yo te estaré guiando
Por las sendas, de la vida.

Recorreremos caminos
Y sendas no conocidas
Y juntos caminaremos
Por las sendas, de la vida.

Pensarás, ha sido un sueño.
Te parecerá mentira,
pero encontrarás mis huellas
en las sendas, de la vida.

Caminaremos despacio,
Porque no tenemos prisa,
el mundo contemplaremos,
Por las sendas, de la vida

Escucharemos canciones,
Por nosotros conocidas,
Y con amor danzaremos,
Por las sendas, de la vida.

Cuando te sientas cansada,
No te preocupes, querida,
Descansarás en mis brazos,
en las sendas, de la vida.

Y al final de los caminos,
Cuando te quedes dormida,
juntos abandonaremos,
esas sendas, de la vida.
Pa. Sa. Ma.