Esta tarde miré al mar
oscuro, amenazante como el cielo
tan lleno de plúmbeas nubes,
ni una gaviota
de color blanco y acero.
Antes yo tuve otro mar
de peligrosas galernas,
cuyas espumosas olas cuando besaban la arena
me hablaban de amor lejano
en noches de
luna nueva.
Mar voluble y caprichoso,
Y hasta A VECES TRAICIONERO.
Nos enamoras, te alejas y te llevas mil recuerdos.
Mar de variados azules
de misteriosos caminos y de insondables senderos.