LUNA DILE QUE VENGA
Llamando estaba a la luna
la niña desde las eras,
llorando estaban sus ojos
por que la luna saliera.
Y con carita de pena
buscaba entre las estrellas,
una nube la ocultaba
por eso no podía verla.
Con su voz enronquecida
y con sus cinco sentidos,
iba buscando a su amado
porque se había perdido.
¡Ay! Luna, lunita clara
enséñale tú el camino,
dile que sigo esperando
dile, que yo no lo olvido.
Que vuelvo a estar en la era
donde ayer nos prometimos,
dile que no se le olvide
que tú fuiste mi testigo.
Que me juró amor eterno
y que tiene que cumplirlo,
que el
hombre que jura en vano
Dios le mando su castigo.
Dile que venga de prisa
que esperar es un martirio,
dile que vuelva a mi vera
que lo quiero con delirio.
Pa. Sa. Ma.