De nuestro abrazo aquí sobre la alfombra
de yerba del recinto sobre el mar
el tiempo no se extraña y, al pensar
totalidad, tu nombre me la nombra.
¿Por qué con nuestro abrazo en esta sombra
súbita, extrañamente familiar,
el tiempo se abre al fin de par en par?
¿Por qué estar piel con piel no nos asombra?
Amar nos reconcilia con la muerte
en esta tarde poco a poco oscura
que hace simple el milagro de tenerte.
Llega el olor del mar hasta la altura,
nos mece y nos susurra su sonido
música de no ser y haber vivido.
de yerba del recinto sobre el mar
el tiempo no se extraña y, al pensar
totalidad, tu nombre me la nombra.
¿Por qué con nuestro abrazo en esta sombra
súbita, extrañamente familiar,
el tiempo se abre al fin de par en par?
¿Por qué estar piel con piel no nos asombra?
Amar nos reconcilia con la muerte
en esta tarde poco a poco oscura
que hace simple el milagro de tenerte.
Llega el olor del mar hasta la altura,
nos mece y nos susurra su sonido
música de no ser y haber vivido.