MIS RÍOS
A falta de mi pequeño río Ablanquejo, me entretuve con otros. De dos ríos de dos vegas: El Arlanzón y el Urbel. Como de la noche al día. El Arlanzón habita entre las sombras, y el Urbel a pleno sol del día.
¡Qué contraste de veredas, de pueblos que lo habitan! Me hice callada música y un buen día: me puse a gritar de ira.
Esto es ya historia, pero hace unos días me invitaron a componer un poema para el río Urbel, que al Arlanzón lo he puesto ya muy fino y a los que lo ensuciaron ... (ver texto completo)
A falta de mi pequeño río Ablanquejo, me entretuve con otros. De dos ríos de dos vegas: El Arlanzón y el Urbel. Como de la noche al día. El Arlanzón habita entre las sombras, y el Urbel a pleno sol del día.
¡Qué contraste de veredas, de pueblos que lo habitan! Me hice callada música y un buen día: me puse a gritar de ira.
Esto es ya historia, pero hace unos días me invitaron a componer un poema para el río Urbel, que al Arlanzón lo he puesto ya muy fino y a los que lo ensuciaron ... (ver texto completo)