A la estudiantina burgalesa
Oigo al pie de mi balcón
Vuestra gentil serenata.
¡Cuánto es a mi oído grata!
¡Cuán grata a mi corazón!
Pusieron hondos pesares
Entre Castilla y yo el mar,
Y a Castilla al regresar
Me recibís con cantares.
¡Dios os dé tanto placer
Como con ellos me dais!
Si un día en España dejáis,
Como a mí os haga volver.
Temí que mi corazón
Se hubiera insensible hecho,
Pero palpita en mi pecho
De vuestra música al son.
Y pues le hace ella latir
Después de tanto pesar,
Tal serenata a pagar
Debe el corazón salir.
¡Gracias, pueblo burgalés!
En cambio de la canción
Que envías a mi balcón,
Los versos echo a tus pies.
No extrañes si en el hogar
Do entre lágrimas me hospedo,
Tu serenata no puedo
Con gayos versos pagar.
Págote con éstos, pues;
Mas nunca olvides que son,
Tan pobres como los ves,
Hechos con el corazón.
(Jose Zorrilla)
Oigo al pie de mi balcón
Vuestra gentil serenata.
¡Cuánto es a mi oído grata!
¡Cuán grata a mi corazón!
Pusieron hondos pesares
Entre Castilla y yo el mar,
Y a Castilla al regresar
Me recibís con cantares.
¡Dios os dé tanto placer
Como con ellos me dais!
Si un día en España dejáis,
Como a mí os haga volver.
Temí que mi corazón
Se hubiera insensible hecho,
Pero palpita en mi pecho
De vuestra música al son.
Y pues le hace ella latir
Después de tanto pesar,
Tal serenata a pagar
Debe el corazón salir.
¡Gracias, pueblo burgalés!
En cambio de la canción
Que envías a mi balcón,
Los versos echo a tus pies.
No extrañes si en el hogar
Do entre lágrimas me hospedo,
Tu serenata no puedo
Con gayos versos pagar.
Págote con éstos, pues;
Mas nunca olvides que son,
Tan pobres como los ves,
Hechos con el corazón.
(Jose Zorrilla)