La canto Santa Teresa
Pues que el buen Esposo
Quiere nuestro amor,
a la gala gala de la Religión.
¡Oh qué ricas bodas ordenó Jesús!
Quiérenos a todas, y danos la luz;
sigamos la Cruz, con gran perfección:
a la gala gala de la Religión.
Este es el estado de Dios escogido,
con que del pecado nos ha defendido.
Nos ha prometido la consolación,
si con él se alegra nuestro corazón.
Nos dará grandezas en la eterna gloria,
si por sus riquezas dejamos la escoria
que hay en este mundo, y su perdición,
a la gala gala de la Religión.
¡Oh qué cautiverio de gran libertad!
Venturosa vida para eternidad.
No quiero librar ya mi corazón.
A la gala gala de la Religión.
Pues que el buen Esposo
Quiere nuestro amor,
a la gala gala de la Religión.
¡Oh qué ricas bodas ordenó Jesús!
Quiérenos a todas, y danos la luz;
sigamos la Cruz, con gran perfección:
a la gala gala de la Religión.
Este es el estado de Dios escogido,
con que del pecado nos ha defendido.
Nos ha prometido la consolación,
si con él se alegra nuestro corazón.
Nos dará grandezas en la eterna gloria,
si por sus riquezas dejamos la escoria
que hay en este mundo, y su perdición,
a la gala gala de la Religión.
¡Oh qué cautiverio de gran libertad!
Venturosa vida para eternidad.
No quiero librar ya mi corazón.
A la gala gala de la Religión.