Hola Noemí:
Te saludo desde Burgos. Aquí la primavera ya paso y todavía estamos en el verano, hasta el día 21 de septiembre, será todavía verano. Ha sido un verano atípico, con muchos días fríos, pero lo que nos queda ya va a ser mejor. Aquí el otoño es una prolongación del verano (que no pudo ser este año del todo); pero yo creo que es la mejor estación del año. Porque es apacible, sin sobresaltos y armoniosa. Y donde, si hace frío, es lo normal que ocurra. Y si hace calor, es bien recibido. El campo se vuelve más amarillo y el verde resalta mas. Unos árboles de hoja caduca amarillean después de haber dado fruto unos, o de mantenerlos entre sus ramas todavía; Luego se tornas rojizos, ocres y marrones; y después todos pierden sus hojas, pero poco a poco. Es un proceso lento hasta llegar al invierno en que ya los árboles están más desnudos que nunca. Otros, por el contrario, los de hoja peremne, siguen luciendo en todo su esplendor, con menos fuerza, pero no se les nota apenas. Se ve que se van renovando por dentro sin dar pruebas de debilidad. Y tampoco tuvieron que soportar el desgaste de los frutos, como les ocurrió a los de hoja caduca, ni la incertidumbre de que sus flores llegasen a convertirse en cerezas, peras, manzanas, ciruelas, nueces...
Para la primavera de tu tierra te envío este poema (tengo muchos dedicados a la primavera y al otoño) Aquí la primavera es a veces muy dura por las inclemencias del tiempo: viento, agua, granizo e incluso hielo. de todo hay.
En otro envío te mando el poema.
Te saludo desde Burgos. Aquí la primavera ya paso y todavía estamos en el verano, hasta el día 21 de septiembre, será todavía verano. Ha sido un verano atípico, con muchos días fríos, pero lo que nos queda ya va a ser mejor. Aquí el otoño es una prolongación del verano (que no pudo ser este año del todo); pero yo creo que es la mejor estación del año. Porque es apacible, sin sobresaltos y armoniosa. Y donde, si hace frío, es lo normal que ocurra. Y si hace calor, es bien recibido. El campo se vuelve más amarillo y el verde resalta mas. Unos árboles de hoja caduca amarillean después de haber dado fruto unos, o de mantenerlos entre sus ramas todavía; Luego se tornas rojizos, ocres y marrones; y después todos pierden sus hojas, pero poco a poco. Es un proceso lento hasta llegar al invierno en que ya los árboles están más desnudos que nunca. Otros, por el contrario, los de hoja peremne, siguen luciendo en todo su esplendor, con menos fuerza, pero no se les nota apenas. Se ve que se van renovando por dentro sin dar pruebas de debilidad. Y tampoco tuvieron que soportar el desgaste de los frutos, como les ocurrió a los de hoja caduca, ni la incertidumbre de que sus flores llegasen a convertirse en cerezas, peras, manzanas, ciruelas, nueces...
Para la primavera de tu tierra te envío este poema (tengo muchos dedicados a la primavera y al otoño) Aquí la primavera es a veces muy dura por las inclemencias del tiempo: viento, agua, granizo e incluso hielo. de todo hay.
En otro envío te mando el poema.
¡Hola, Carmen!
Estuve con mi esposo en agosto en España, y visitamos Burgos, capital, del 5 al 8, y luego nos alojamos en Salas de los Infantes, desde donde nos desplazamos a Moncalvillo de la Sierra, donde tengo mis raíces maternas, Castrovido, Santo Domingo de Silos, Covarrubias y Castrillo de la Reina. ¿En qué parte de Burgos te encuentras tú? Nos encantó esta provincia. Aguardo tu poema. ¡Un gran abrazo!
Noemí
Estuve con mi esposo en agosto en España, y visitamos Burgos, capital, del 5 al 8, y luego nos alojamos en Salas de los Infantes, desde donde nos desplazamos a Moncalvillo de la Sierra, donde tengo mis raíces maternas, Castrovido, Santo Domingo de Silos, Covarrubias y Castrillo de la Reina. ¿En qué parte de Burgos te encuentras tú? Nos encantó esta provincia. Aguardo tu poema. ¡Un gran abrazo!
Noemí