Y digo yo que... Lo que les faltaba

¿Tenemos razones solidas para apoyar el 15-M?
Muchas de las personas, casi todas, que se manifiestan abiertamente contra el movimiento DEMOCRACIA REAL YA, suelen por lo general hacerlo alegando a su postura la ilegalidad del movimiento, el aspecto físico de las personas que componen la formación, su juventud -cuando siempre supusimos a los jóvenes incapaces de pensar-, o tachandolos de anarquistas, pertenecer a la extrema izquierda, o ser simpatizantes del mundillo proetarra.
Muy pocos, casi nadie, lo hace manifestando su desacuerdo con las propuestas que ofrece este movimiento.
¿Qué es lo que nos propone Democracia Real Ya?

1. ELIMINACIÓN DE LOS PRIVILEGIOS DE LA CLASE POLÍTICA.
2. CONTRA EL DESEMPLEO.
3. DERECHO A LA VIVIENDA.
4. SERVICIOS PÚBLICOS DE CALIDAD.
5. CONTROL DE LAS ENTIDADES BANCARIAS.
6. FISCALIDAD: o Aumento del tipo impositivo a las grandes fortunas y entidades bancarias.
7. LIBERTADES CIUDADANAS Y DEMOCRACIA PARTICIPATIVA.
8. REDUCCIÓN DEL GASTO MILITAR.

Personalmente considero acertadas sus reivindicaciones, pero, muy deficientes, terriblemente insuficiente respecto al nivel que deberían alcanzar.
¿Qué hacer con el resto de cosas que sobran o nos faltan?
¿Cómo se va a llevar a cabo la ejecución de estas propuestas?
¿Qué linea de acción se va a seguir por parte del movimiento?
¿Con esas propuestas, dejarán de ser los ricos cada vez más ricos y los pobres cada día más y más pobres?
¿Dejará de haber déspotas y poderosos que humillen y exploten a los más débiles?
¿Gozaremos de verdad de la ansiada libertad de vivir y morir como queramos?
¿Desaparecerán los ejércitos, las armas, la policía y el injusto orden social que imponen?
¿Dejarán las multinacionales de los países ricos de robar a los países pobres?
¿Volverán a sus hogares los 44 millones de personas que se ven obligadas a abandonar sus casas por las guerras o los desastres naturales y a las escuelas los 250.000 niños que luchan en absurdas guerras que ni ellos ni dios entiende?
¿Cesará la terrible situación que vive un tercio de la población mundial y de la que ninguno somos del todo inocentes?
Ahora, todas estas cosas pueden parecer inocuas e inocentes, sobre todo a las personas que vivimos con un relativo bienestar, pero hemos llegado al límite, y aquellos de vosotros que sospecháis que todo tiene arreglo, erráis: ya nunca organizaremos este caos sin dolor, sin un enorme esfuerzo colectivo, o creando un caos aun mayor: es el amargo resultado de nuestra ilimitada codicia.
El capitalismo está anticuado y es inadecuado a las circunstancias actuales; usureros y especuladores nos despertaron del feliz sueño y nos lanzaron a la realidad de un sistema socioeconómico obsoleto y aberrante. La idea que promulga de crecimiento perenne es irracional, y demencial su determinación de lograrlo trabajando más y cobrando menos. Somos demasiados y nos enfrentamos al mayor fracaso de la humanidad en la tierra que nos fue dada; que ya no soporta más nuestra manera de vivir. Su historia es un proceso de continuos cambios, y es ahora, ¡YA!, que se hace necesario un nuevo cambio que nos liberará de la vergüenza ante futuras generaciones por destruir lo que les pertenece. Hora es de poner freno, los recursos se agotan, no podemos continuar durante más tiempo con el actual nivel de consumo, ¡seamos responsables! El capitalismo ha consumado su cometido en la historia, es imposible erradicar la codicia por ley, y los remedios de San Obama no son efectivos, tendremos que renunciar a nuestra lucha por el poder y a tener más y más riquezas cada día. La nueva era nos invita a colaborar, a ayudar a los más débiles, a combatir el despotismo la avaricia y la prepotencia para lograr un mundo más solidario y justo; a dejar de ser el hombre un lobo para el hombre.
Se hace de imperante la necesidad por parte de los que ya no somos tan jóvenes, de alentar y animar a la juventud, no ya a pedir, sino a exigir un cambio que les permita en un futuro ser libres y felices en esta tierra que se nos dio.
Doy por perdidas las batallas 15-M y posteriores desde que los partidos políticos después de mandar a sus secuaces a apalear a personas pacíficas y desarmadas, ven con buenos ojos las reivindicaciones del movimiento; cambiarán las cosas para que nada cambie y nos engañarán de nuevo. Y sabed esto también, aunque mis palabras lastimen vuestro entendimiento y resulten dolorosas a vuestros corazones: Esta batalla tampoco la habríamos luchado de habernos ido las cosas tan solo un poco mejor. Somos victimas de un robo, pero no estamos libres de culpa por ser robados.
No... No podéis conformar nuestras conciencias pidiendo solo un poco más de democracia, pedirlo todo, ¡pedirlo ya!, el planeta os pertenece y el futuro es vuestro; como lo es en igual medida de millones y millones de jóvenes en todos los países del mundo. Y como pudo serlo de los 5,6 millones de niños que mueren cada año por desnutrición. ¿Qué es lo que hace hombre al hombre? Tenemos que seguir siendo humanos el resto de nuestras vidas.

Adrián