En, absoluto, quimin, tus escritos no me aburren. Aquí tenemos un matrimonio de Guadalajara, que artos de la ciudad decidieron venirse a un pueblo y aterrizaron en este. Están encantados de la vida. Ella muchas veces nos dice que no hecha en absoluto de menos la rutina diaria de la ciudad y como aquí, (no es por presumir) somos buena gente y acogemos al extrangero como si fuera del pueblo de toda la vida, pues aun mejor. Pero incluso te diré más, no hace muchos dias me enteré, que mi antigua novia, con la que lo deje por que ella no queria regresar al pueblo y yo no me queria ir a vivir a Madrid (con buentrabajo y todo), resulta que está arreglando una antigua cas para venirse a vivir al pueblo, por que su marido (madrileño de nacimiento) se siente más agusto aquí que en Madrid. O sea que algo bueno tendrá el pueblo y la tendencia es esa. Sin necesid
efectvamente amigo corzón. el pueblo rural es el verdadero embrion de la economia sostenible. recuerdo, con nostalgia y veneracion, a mi familia en la cual habia de todo: ganado, cereales, olivos, pozos de agua para animales domesticos y personas, luz con candiles y faroles de aceite propia, calefacion y agua caliente con el fuego de nuestra propia leña, que, ademas servia para cocinar. solo recuerdo la compra excecional de cafe, sadinas, bacalado salado para el potaje. habia una huerta con toda clese de verduras, hortalizas, plantas aromatica, laurel y arboles frutales. mucho y saludable. me costearon un internado y la universidad. en vacaciones era un obrero mas y llevaba las cuentas. para tener tractor me tuve que sacar el carnet de tractorista.
te regalo una idea de futuro: montar un hotelito rural para desintoxicacion de los urbanitas enfermos de la polucion, ruido, estres, angustia vital, alimentacion insana, soledad, insomnio.... una especie de spas para la salud del cuerpo y alma. negocio seguro este balneario para curar la urbanitis cronica.
un abrazo y que fluyan las ideas innovadoras aunque de diez solo se haga realidad una y con enmiendas.
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