Ya lo
Reyes Magos no lo cuentan como a mi me los contaban en la lancha de la lumbre, cuando con la leña se alumbraba, teniamos un candil de acite y una hilada.
Que tremenda era ni
abuela de los Reyes que contaba, que como éramos pobres, no nos taeirian nada.
y sin embargo mi madre la quitaba la razon, hijos no creerla nada
que vuestro pradre tiene guadado dos peseta y dos naranjas en el cajón.
Que contentos nos poniamos mi herma julia y yo, por que llegando ese dia mi madre tenia razón.