Siempre me resulto extraña la frase " mucha mierda" con que los actores de nuestra
escena teatral se prodigan cuando tienen un estreno.
Y mis tiempos jóvenes por este Madrid eterno me posibilitaron el conocer a muchos
actores y actrices cuando frecuentaba, sobre todo, Bocaccio.
En este establecimiento me explico una noche el recientemente viajero a terrenos celestiales
Paco Valladares, el significado que para su profesión tenia la frase o el deseo que se decían.
Parece ser que cuando en Madrid no existían automóviles a motor, o sea cuando eran
épocas de " coches de caballos" cuando había muchos de estos aparcados, esperando
a sus señores, es que la obra tenia éxito. Por eso había tantos coches de caballos fuera.
Lógicamente cuando se terminaba la sesión teatral y se marchaban los coches, la calle
aparecía llena de excrementos de los caballos. De ahí el noble deseo de " mucha mierda"
que aun permanece entre los actores contemporáneos.
escena teatral se prodigan cuando tienen un estreno.
Y mis tiempos jóvenes por este Madrid eterno me posibilitaron el conocer a muchos
actores y actrices cuando frecuentaba, sobre todo, Bocaccio.
En este establecimiento me explico una noche el recientemente viajero a terrenos celestiales
Paco Valladares, el significado que para su profesión tenia la frase o el deseo que se decían.
Parece ser que cuando en Madrid no existían automóviles a motor, o sea cuando eran
épocas de " coches de caballos" cuando había muchos de estos aparcados, esperando
a sus señores, es que la obra tenia éxito. Por eso había tantos coches de caballos fuera.
Lógicamente cuando se terminaba la sesión teatral y se marchaban los coches, la calle
aparecía llena de excrementos de los caballos. De ahí el noble deseo de " mucha mierda"
que aun permanece entre los actores contemporáneos.