MADRID LAS RATAS AVANZAN
Hace en estas fechas unos veinte años aproximadamente, un Taxi de Madrid circulaba por la calle Espalter, cerca del Retiro y del Jardín Botánico, sobre las doce de la noche, al dar la vuelta desde la calle de Alfonso XII, el viajero y el taxista, pudieron comprobar, que una rata del tamaño casi de un gato normal, se paseaba por la parte de la calzada pegando a la acera, donde existía una hermosa alcantarilla. Las dos personas se asustaron del tamaño tan enorme de dicho animal. Este otoño pasado, el propietario de un coche Octavia, llegado de Madrid a Calpe, al arrancar su vehículo, una vez llegado allí, se dio cuenta que la luz del alternador no se apagaba, y dando varios acelerones, tuvo que parar el motor, al ver que seguía dicha luz encendida. y levantando el capo, notó que le faltaba la correa del alternador, Sin pensarlo ni un momento más, se acercó con su coche aun taller próximo, donde al día siguiente le enseñaban las correas llenas de pelos de ratas, y dichas correas comidas por esos animales. Este hombre dueño del coche se dio cuenta, que hacía poco tiempo que las ratas se metieron en el garaje, y atacaron a varios coches, dejando incluso sus desperdicios. Los dueños de dicho garaje, empezaron su guerra contra esos animales. Poniendo venenos, y soltando espuma de jabón por todos los desagües a la misma hora. Incluso harina y fosforo de cerillas envueltos como una masa, Madrid ya se ha comentado en algunas comunidades, el problema tan grande que existe con esos animales, ya que tengo entendido que hasta los cables de los semáforos se los comen. La solución de poder disminuir esa cantidad tan enorme de problema seria, todos los vecinos a la misma hora minuto y segundo, con agua y espuma de jabón. Echarlo por los servicios lavabos, fregaderos, y cualquier lugar donde se eche agua o residuos de lavadoras. Para que la espuma puede anularles por algún tiempo. Ya que estos animales se adaptan a comer veneno y terminan engordando con él. Madrid no puede dejar que sea invadido por las ratas, ni que sus habitantes tengan los coches expuestos a esas averías de bastante dinero. Habrá que tomar alguna medida para evitar muchos problemas. G X Cantalapiedra. 7 - 2 – 2021.
Hace en estas fechas unos veinte años aproximadamente, un Taxi de Madrid circulaba por la calle Espalter, cerca del Retiro y del Jardín Botánico, sobre las doce de la noche, al dar la vuelta desde la calle de Alfonso XII, el viajero y el taxista, pudieron comprobar, que una rata del tamaño casi de un gato normal, se paseaba por la parte de la calzada pegando a la acera, donde existía una hermosa alcantarilla. Las dos personas se asustaron del tamaño tan enorme de dicho animal. Este otoño pasado, el propietario de un coche Octavia, llegado de Madrid a Calpe, al arrancar su vehículo, una vez llegado allí, se dio cuenta que la luz del alternador no se apagaba, y dando varios acelerones, tuvo que parar el motor, al ver que seguía dicha luz encendida. y levantando el capo, notó que le faltaba la correa del alternador, Sin pensarlo ni un momento más, se acercó con su coche aun taller próximo, donde al día siguiente le enseñaban las correas llenas de pelos de ratas, y dichas correas comidas por esos animales. Este hombre dueño del coche se dio cuenta, que hacía poco tiempo que las ratas se metieron en el garaje, y atacaron a varios coches, dejando incluso sus desperdicios. Los dueños de dicho garaje, empezaron su guerra contra esos animales. Poniendo venenos, y soltando espuma de jabón por todos los desagües a la misma hora. Incluso harina y fosforo de cerillas envueltos como una masa, Madrid ya se ha comentado en algunas comunidades, el problema tan grande que existe con esos animales, ya que tengo entendido que hasta los cables de los semáforos se los comen. La solución de poder disminuir esa cantidad tan enorme de problema seria, todos los vecinos a la misma hora minuto y segundo, con agua y espuma de jabón. Echarlo por los servicios lavabos, fregaderos, y cualquier lugar donde se eche agua o residuos de lavadoras. Para que la espuma puede anularles por algún tiempo. Ya que estos animales se adaptan a comer veneno y terminan engordando con él. Madrid no puede dejar que sea invadido por las ratas, ni que sus habitantes tengan los coches expuestos a esas averías de bastante dinero. Habrá que tomar alguna medida para evitar muchos problemas. G X Cantalapiedra. 7 - 2 – 2021.