15 M.
Dice:
MARIANO DE PEDRO - Murcia
Hay bastantes propuestas planteadas por el Movimiento 15-M, que son asumibles y viables por sensatas. Hay otras que pertenecen más al mundo de la utopía. Pero, en general, este movimiento ha removido no pocas conciencias y ha ayudado a despertar del letargo a muchos jóvenes y no menos jóvenes. Su indignación está justificada. Bien harían los poderes públicos en escuchar este movimiento y generar vías de participación democrática.
Está bien que se focalice en lo inmediato, aquí en España. Pero en esta sociedad en la que vivimos, en la que la economía está globalizada y los mercados también, emerge un poder no democrático que está imponiendo sus reglas. Este poder, que es el principal responsable de la grave crisis que afecta al mundo, es el capital financiero especulativo, que ejerce una dictadura feroz contra todos, Gobiernos y ciudadanos.
Por ello hay que ir más allá, extender estas movilizaciones a Europa. Habrá que globalizar también la política, la acción sindical, la rebeldía. Que esos centros de poder, y su arrogancia, empiecen a darse cuenta de que no será fácil acabar con el Estado de bienestar y los derechos conquistados, y que el juego democrático y la resistencia social empiece, cuando menos, a inquietarles.
Saludos.
Dice:
MARIANO DE PEDRO - Murcia
Hay bastantes propuestas planteadas por el Movimiento 15-M, que son asumibles y viables por sensatas. Hay otras que pertenecen más al mundo de la utopía. Pero, en general, este movimiento ha removido no pocas conciencias y ha ayudado a despertar del letargo a muchos jóvenes y no menos jóvenes. Su indignación está justificada. Bien harían los poderes públicos en escuchar este movimiento y generar vías de participación democrática.
Está bien que se focalice en lo inmediato, aquí en España. Pero en esta sociedad en la que vivimos, en la que la economía está globalizada y los mercados también, emerge un poder no democrático que está imponiendo sus reglas. Este poder, que es el principal responsable de la grave crisis que afecta al mundo, es el capital financiero especulativo, que ejerce una dictadura feroz contra todos, Gobiernos y ciudadanos.
Por ello hay que ir más allá, extender estas movilizaciones a Europa. Habrá que globalizar también la política, la acción sindical, la rebeldía. Que esos centros de poder, y su arrogancia, empiecen a darse cuenta de que no será fácil acabar con el Estado de bienestar y los derechos conquistados, y que el juego democrático y la resistencia social empiece, cuando menos, a inquietarles.
Saludos.