Cuando yo escribo aquí, pidiendo respeto para que los ateos que pasamos de las escandalosas procesiones públicas de Semana Santa, podamos deambular libremente por las calles de las ciudades; algunos foreros y foreras de este foro común se me tiran al cuello argumentando contra mi opinión basándose en la libertad religiosa y mira por donde algunos de esos foreros y foreras, ante el delito contra esa misma libertad, concretamente CONTRA LOS SENTIMIENTOS RELIGIOSOS, cometido por Rita Maestre, concejal de Podemos, portavoz del equipo en el ayuntamiento madrileño que dirige Manuela Carmena; guiados de sus ideales políticos, olvidando el obligado respeto a los católicos; se muestran flexibles, tolerantes e incluso alguno dice la barbaridad de que tal acto está dentro del derecho constitucional de manifestación.
Pues bien, el delito de ofensa a los sentimientos religiosos se comete irrumpiendo en un acto religioso como en este caso que un sacerdote impartía un acto católico dirigido a algunos jóvenes estudiantes que asistían al mismo y según nuestro Código Penal este delito está perfectamente tipificado como lo digo a continuación:
Artículo 523 del vigente Código Penal español
El que con violencia, amenaza, tumulto o vías de hecho, impidiere, interrumpiere o perturbare los actos, funciones, ceremonias o manifestaciones de las confesiones religiosas inscritas en el correspondiente registro público del Ministerio de Justicia e Interior, será castigado con la pena de prisión de seis meses a seis años, si el hecho se ha cometido en lugar destinado al culto, y con la de multa de cuatro a diez meses si se realiza en cualquier otro lugar.
Después de todo, al concejala en cuestión ha tenido mucha suerte porque lo normal es que la fiscalía hubiese pedido para ella TRES AÑOS de cárcel en consonancia con la pena que tiene tipificada el delito cometido (de seis meses a seis años de prisión) en vez de un año con lo que no pisará la cárcel.
Y que tenga que ser un ateo el que salga en defensa de los sentimientos de los religiosos,! tiene guasa!.
saludos
Pues bien, el delito de ofensa a los sentimientos religiosos se comete irrumpiendo en un acto religioso como en este caso que un sacerdote impartía un acto católico dirigido a algunos jóvenes estudiantes que asistían al mismo y según nuestro Código Penal este delito está perfectamente tipificado como lo digo a continuación:
Artículo 523 del vigente Código Penal español
El que con violencia, amenaza, tumulto o vías de hecho, impidiere, interrumpiere o perturbare los actos, funciones, ceremonias o manifestaciones de las confesiones religiosas inscritas en el correspondiente registro público del Ministerio de Justicia e Interior, será castigado con la pena de prisión de seis meses a seis años, si el hecho se ha cometido en lugar destinado al culto, y con la de multa de cuatro a diez meses si se realiza en cualquier otro lugar.
Después de todo, al concejala en cuestión ha tenido mucha suerte porque lo normal es que la fiscalía hubiese pedido para ella TRES AÑOS de cárcel en consonancia con la pena que tiene tipificada el delito cometido (de seis meses a seis años de prisión) en vez de un año con lo que no pisará la cárcel.
Y que tenga que ser un ateo el que salga en defensa de los sentimientos de los religiosos,! tiene guasa!.
saludos