Con ministros asi es lógico que nos tomen por el pito de un sereno en Europa.
El ministro insistía en los riesgos de gravar las grandes fortunas. No lo ha hecho y el dinero ha escapado en niveles sin precedentes
Montoro presumió de la fórmula para atajar la fuga de capitales… y ha visto en sus narices una desbandada histórica
El propio Montoro advertía en 2010 de que se iba a producir en España este fenómeno, pero una vez con las riendas el problema se ha agravado seriamente. Alertó de que gravar las grandes fortunas provocaría la fuga, y no lo hecho, pero el ritmo de salida de capitales no ha hecho sino crecer hasta niveles sin precedentes.
Esta semana el Banco de España difundía que la salida neta de capitales del país (sin contar con las operaciones del BE) alcanzó los 163.185,9 millones de euros en los cinco primeros meses del año, de los que 41.294,3 millones salieron sólo en mayo
Preocupantes cifras
En el mismo periodo de 2011 el saldo era positivo y se acumulaba una entrada neta de capital de 14.598,5 millones, de acuerdo con los datos de la balanza de pagos publicados el Banco de España, entonces gobernaba el PSOE.
El PP lo primero que hizo en el poder subir el IRPF, incumpliendo así las premisas prometidas por Montoro. Pero más que la subida del IRPF, lo que más le preocupaba en la oposición al ahora ministro era un posible impuesto sobre la banca o grandes fortunas, como ha hecho Francia -que entre otras cosas ha incrementado las tasas a las transacciones financieras y ha bajado el umbral de las exenciones fiscales asociadas a las donaciones, fundaciones y sucesiones-. Pero aquí no hay cojones.
“Subir ahora el impuesto a los ricos provocaría una fuga de capitales”. No lo ha hecho -más allá de la subida de los tramos del IRPF- y no ha creado nuevos gravámenes a los grandes capitales, y a pesar de sus miramientos, la desconfianza generada por la gestión de problemas como el de Bankia llevó a los ricos a darle la espalda. Otro dogma que se le cae a Montoro, como aquel de que los duros ajustes eran compatibles con el crecimiento o que se podía cuadrar las cuentas bajando impuestos.
Seguimos con la reconquista desde el SUR le pese a quien le pese.
El ministro insistía en los riesgos de gravar las grandes fortunas. No lo ha hecho y el dinero ha escapado en niveles sin precedentes
Montoro presumió de la fórmula para atajar la fuga de capitales… y ha visto en sus narices una desbandada histórica
El propio Montoro advertía en 2010 de que se iba a producir en España este fenómeno, pero una vez con las riendas el problema se ha agravado seriamente. Alertó de que gravar las grandes fortunas provocaría la fuga, y no lo hecho, pero el ritmo de salida de capitales no ha hecho sino crecer hasta niveles sin precedentes.
Esta semana el Banco de España difundía que la salida neta de capitales del país (sin contar con las operaciones del BE) alcanzó los 163.185,9 millones de euros en los cinco primeros meses del año, de los que 41.294,3 millones salieron sólo en mayo
Preocupantes cifras
En el mismo periodo de 2011 el saldo era positivo y se acumulaba una entrada neta de capital de 14.598,5 millones, de acuerdo con los datos de la balanza de pagos publicados el Banco de España, entonces gobernaba el PSOE.
El PP lo primero que hizo en el poder subir el IRPF, incumpliendo así las premisas prometidas por Montoro. Pero más que la subida del IRPF, lo que más le preocupaba en la oposición al ahora ministro era un posible impuesto sobre la banca o grandes fortunas, como ha hecho Francia -que entre otras cosas ha incrementado las tasas a las transacciones financieras y ha bajado el umbral de las exenciones fiscales asociadas a las donaciones, fundaciones y sucesiones-. Pero aquí no hay cojones.
“Subir ahora el impuesto a los ricos provocaría una fuga de capitales”. No lo ha hecho -más allá de la subida de los tramos del IRPF- y no ha creado nuevos gravámenes a los grandes capitales, y a pesar de sus miramientos, la desconfianza generada por la gestión de problemas como el de Bankia llevó a los ricos a darle la espalda. Otro dogma que se le cae a Montoro, como aquel de que los duros ajustes eran compatibles con el crecimiento o que se podía cuadrar las cuentas bajando impuestos.
Seguimos con la reconquista desde el SUR le pese a quien le pese.