navidad pasa el tiempo y sigue igual una ilusión pasajera, pero esos dias al menos te hace sentir diferente.
Lo dirás tu, esa navidad con minúsculas de la que tu hablas es otra, tal y como lo celebran los ateos, agnósticos, protestantes y paganos.
La Navidad cristiana es otra cosa.
Un saludo
La Navidad cristiana es otra cosa.
Un saludo
Los ateos, paganos, agnósticos, no celebran la Navidad, simplemente cogen vacaciones.
Maria Eloisa: aclaremos esto.
Nací antes de unas fechas, que muchos recordaremos toda la vida, asi como los años que siguieron, cuando ya por fin sonaron algunas zambombas de paz: digo algunas, puesto que las tradiciones continuaron, y dentro de ellas algunas cosas, se nos quiso inculcar a la fuerza y sin miramiento alguno. Ni antes ni despues, todos fueron creyentes, lo que nio quiere decir que fueran peor que los OTROS. Si se montó una persecución exagerada, contra quienes no ponían la mano en alto, cantaban o rezaban; les gustara o no los cánticos o rezos nadie preguntaba, muchos exigían. Y entre esos muchos los que comían a dos carrillos.
Estoy diciendo ni mas ni menos, que desde Adan y Eva, hasta que crucificaron a Jesús, solo me detuve, CONVENCIDO, que aquel niño no mereció, tan horrible muerte.
Siempre me he preguntado el porqué y las respuestas las encuentro todos los días. en la multitud de niños que nacen y mueren, sin aún haber aprendido a reír. Por esto y por comportamientos, y comparando la riqueza del vaticano, todo lo que representa, con el llamado humilde pesebre, me rebelé, y un día me descubrí que solo creo en los muchos belenes, tras de aquel, que llevaría a la muerte, a él, y a muchos que en el creyeron. ¿De verdad TODOS igual que él? Esa es la pregunta, cuya respuesta me llega todos los días.
"Simplemente cogen vacaciones"-dices- Muy cierto, de la misma manera que las cogen hoy muchos, sin pensar en los muchos belenes que se dan en el mundo.
Las navidades, siempre me han entristecido. Se muy bien como fueron las de niño y las otras que siguieron... algunas sin tiempo de cantar un villancico en familia. Otras te aproximabas a los tuyos, y, pasaban estos días, y ese amor, que parecían desprender tantas luces, tanto preparativo, tanta abundancia al lado mismo de la carencia, te hace pensar, que a Cristo, le han segido muy pocos. Y que los que han aprendido sus enseñanzas y las practican, son dinos de admiración.
Resumiendo: amar un poco mas al projimo todos los días, y no amar o fingir amar mucho unos pocos días.
De otro lado, la vida es dura, y, no lo sería tanto, si cantáramos villancicos
desde el corazon mas a menudo.
Para mi, estas fiestas, mas de una vez han sido motivos de tristeza. Dura tristeza, y otras... ya lo digo: hay diferentes maneras de rezar.
Saludos.
Nací antes de unas fechas, que muchos recordaremos toda la vida, asi como los años que siguieron, cuando ya por fin sonaron algunas zambombas de paz: digo algunas, puesto que las tradiciones continuaron, y dentro de ellas algunas cosas, se nos quiso inculcar a la fuerza y sin miramiento alguno. Ni antes ni despues, todos fueron creyentes, lo que nio quiere decir que fueran peor que los OTROS. Si se montó una persecución exagerada, contra quienes no ponían la mano en alto, cantaban o rezaban; les gustara o no los cánticos o rezos nadie preguntaba, muchos exigían. Y entre esos muchos los que comían a dos carrillos.
Estoy diciendo ni mas ni menos, que desde Adan y Eva, hasta que crucificaron a Jesús, solo me detuve, CONVENCIDO, que aquel niño no mereció, tan horrible muerte.
Siempre me he preguntado el porqué y las respuestas las encuentro todos los días. en la multitud de niños que nacen y mueren, sin aún haber aprendido a reír. Por esto y por comportamientos, y comparando la riqueza del vaticano, todo lo que representa, con el llamado humilde pesebre, me rebelé, y un día me descubrí que solo creo en los muchos belenes, tras de aquel, que llevaría a la muerte, a él, y a muchos que en el creyeron. ¿De verdad TODOS igual que él? Esa es la pregunta, cuya respuesta me llega todos los días.
"Simplemente cogen vacaciones"-dices- Muy cierto, de la misma manera que las cogen hoy muchos, sin pensar en los muchos belenes que se dan en el mundo.
Las navidades, siempre me han entristecido. Se muy bien como fueron las de niño y las otras que siguieron... algunas sin tiempo de cantar un villancico en familia. Otras te aproximabas a los tuyos, y, pasaban estos días, y ese amor, que parecían desprender tantas luces, tanto preparativo, tanta abundancia al lado mismo de la carencia, te hace pensar, que a Cristo, le han segido muy pocos. Y que los que han aprendido sus enseñanzas y las practican, son dinos de admiración.
Resumiendo: amar un poco mas al projimo todos los días, y no amar o fingir amar mucho unos pocos días.
De otro lado, la vida es dura, y, no lo sería tanto, si cantáramos villancicos
desde el corazon mas a menudo.
Para mi, estas fiestas, mas de una vez han sido motivos de tristeza. Dura tristeza, y otras... ya lo digo: hay diferentes maneras de rezar.
Saludos.