La carne de caballo fraudulenta llegó a
España
No era apta para el consumo y se falsificaron los documentos sanitarios para "blanquear" su origen
CARMEN VELA | Corresponsal en París 16-12-2013 - 18:55 CET
La carne de al menos doscientos caballos declarados no aptos para el consumo han acabado en la cadena alimentaria, mediante la falsificación de documentos veterinarios y la eliminación de su "trazabilidad". El fiscal de Marsella, Brice Robin, habla de una red basada en Narbona (
Francia) de "dimensión internacional", porque parte de la carne se exportó de España
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Fuentes de la investigación apuntan que mataderos de Girona estarían implicados en la operación fraudulenta de "gran dimensión", sobre la que la
Guardia Civil también investiga. Buena parte de los 200 caballos detectados como "no aptos al consumo" procedían de los laboratorios farmacéuticos Sanofi Pasteur, que han anunciado se querellarán al considerarse "víctimas" del fraude.
El fiscal de Marsella encargado del caso señaló que Sanofi ha colaborado y aportado pruebas de que sus veterinarios emitieron los "pasaportes"
animales correctamente para revenderlos a centros de hípica, con la mención explícita de no dedicarlos a la alimentación humana. Pero los documentos veterinarios y el origen de los equinos fueron falsificados. La firma farmacéutica ensayó en caballos determinadas vacunas como la rabia y el tétanos, además de reacciones a determinados
virus.
"El que la carne de esos caballos fuera declarada no apta para el consumo no quiere decir que sea tóxica para el ser humano", recalcó el fiscal, que luego añadió que "no le consta que se hayan hecho pruebas de toxicidad" sobre las piezas requisadas.
En la amplia redada llevada a cabo ayer por miembros de la policía y del
Ejército en once departamentos del sur de Francia, se detuvo a 21 personas, entre ellas 4 veterinarios y a un informático. Robin afirmó que serán acusados de fraude, organización mafiosa, y falsificación de documentos públicos. El fiscal confirmó que la investigación comenzó a finales de 2011 tras una denuncia anónima contra un matadero