OPINIÓN.
EDITORIALES/TRIBUNAS.
Quien siembra vientos recoge tempestades, Pedro Sánchez.
OKDIARIO.
ACTUALIZADO: 24/06/2022 08:52.
Los camioneros volverán a la huelga tras sentirse ninguneados por el Gobierno de Pedro Sánchez, que les prometió una solución a sus demandas y, en realidad, les ofreció migajas. El caos, en estas circunstancias, está garantizado. Hay quien piensa que convocan la huelga en el momento más inoportuno y que utilizan la cumbre atlántica como elemento propagador de sus demandas. Evidente, pero sus reivindicaciones no pueden separarse de la inacción de un Ejecutivo que les prometió aliviar su dramática situación laboral y que no ha hecho nada. Desde el anterior paro, la gasolina, pese al parche de los 20 céntimos, ha seguido subiendo y las previsiones es que el precio siga creciendo. En estas circunstancias es difícil no comprender las razones de este colectivo que prácticamente esta trabajando a pérdidas. No son los únicos, por cierto, porque agricultores, pescadores y ganaderos se encuentran en una situación similar.
Lo que ha hecho el Gobierno de Pedro Sánchez es sembrar vientos. Ahora va a recoger las tempestades de una huelga que pueda ser el preludio de otras muchas, porque el brutal incremento de precios está destrozando literalmente la vida de millones de trabajadores que se enfrentan a la terrible disyuntiva de parar o trabajar perdiendo dinero. Y eso es inaceptable. El Ejecutivo socialcomunista lleva meses parcheando un problema de dimensiones colosales, porque el precio de los carburantes está sepultando literalmente las vidas de trabajadores abrumados por el brutal incremento de los costes.
Madrid será un caos la próxima semana, pero lo que puede ocurrir encontrará su reflejo en otras huelgas venideras. Y es que el clamor de la calle contra la parálisis de un Ejecutivo sobrepasado y que se mueve como un pollo sin cabeza ha agotado la paciencia y los recursos de una parte de España que ya no puede más.
EDITORIALES/TRIBUNAS.
Quien siembra vientos recoge tempestades, Pedro Sánchez.
OKDIARIO.
ACTUALIZADO: 24/06/2022 08:52.
Los camioneros volverán a la huelga tras sentirse ninguneados por el Gobierno de Pedro Sánchez, que les prometió una solución a sus demandas y, en realidad, les ofreció migajas. El caos, en estas circunstancias, está garantizado. Hay quien piensa que convocan la huelga en el momento más inoportuno y que utilizan la cumbre atlántica como elemento propagador de sus demandas. Evidente, pero sus reivindicaciones no pueden separarse de la inacción de un Ejecutivo que les prometió aliviar su dramática situación laboral y que no ha hecho nada. Desde el anterior paro, la gasolina, pese al parche de los 20 céntimos, ha seguido subiendo y las previsiones es que el precio siga creciendo. En estas circunstancias es difícil no comprender las razones de este colectivo que prácticamente esta trabajando a pérdidas. No son los únicos, por cierto, porque agricultores, pescadores y ganaderos se encuentran en una situación similar.
Lo que ha hecho el Gobierno de Pedro Sánchez es sembrar vientos. Ahora va a recoger las tempestades de una huelga que pueda ser el preludio de otras muchas, porque el brutal incremento de precios está destrozando literalmente la vida de millones de trabajadores que se enfrentan a la terrible disyuntiva de parar o trabajar perdiendo dinero. Y eso es inaceptable. El Ejecutivo socialcomunista lleva meses parcheando un problema de dimensiones colosales, porque el precio de los carburantes está sepultando literalmente las vidas de trabajadores abrumados por el brutal incremento de los costes.
Madrid será un caos la próxima semana, pero lo que puede ocurrir encontrará su reflejo en otras huelgas venideras. Y es que el clamor de la calle contra la parálisis de un Ejecutivo sobrepasado y que se mueve como un pollo sin cabeza ha agotado la paciencia y los recursos de una parte de España que ya no puede más.
Se alegran de todo lo malo que ocurra incluso si no ocurren
Pero, como ocurre, lo malo.