Este es el pais de pandereta en que vivimos. Pero del fallecido por la imprudencia del culpable y que además iba bebido, nadie se acuerda. Pais, pais.
Saludos.
Saludos.
En efecto, de la mujer y los dos hijos que deja el fallecido no se acuerda ni Rita. Eso sí, Ortega dijo algo.