Apreciable Ferisa: Siempre por delante mis disculpas...

Apreciable y también amiga Ferisa: Considero personalmente de muy mal gusto tu exposición con alusión directa a los gimnasios, no, no pertenezco ni a los mal denominados explotadores ni tampoco de las personas que frecuenten con asiuidad los gimnasios, pero si soy una ciudadana que respeta o suele respetar cómo se gana la vida toda persona, no olvides que, salvo raras excepciones existe lo que se llama constancia en el trabajo e iniciativas por tanto me agrada mucho que aquellas personas que se lo merecen puedan disfrutar de sus preocupaciones, ya que el porcentaje de gimnasios que son propiedad de los que trabajan también en ellos (si miras las estadísticas) son la mayoría, por tanto dejemos que el que quiera participar en gimnasios por su salud, pueda hacerlo, el que lo haga por aprobar alguna prueba que necesite para alguna oposición también lo haga y por supuesto aquella otra que quiera encontrarse en plena forma ¿por qué criticarlo?, estamos en un estado de derecho y libertad donde cada cuál puede hace lo que crea conveniente siempre que no perjudique al resto del mundo. Un saludo cordial Gloria Ana.

Apreciable Ferisa: Siempre por delante mis disculpas hacia aquellas personas que no comparten mis opiniones, sin embargo, creo estarás de acuerdo conmigo, que ni todo es blanco ni por el contrario negro, existe lo que se denomina una rara mezcolanza entre ambos que es bastante acertada en lo que se refiere a la opinión del bulgo.
¿Explotación?, siempre la hubo y seguirá existiendo, pero en ambos casos, por favor no ametrallemos sin duelo a los empresarios por el hecho de ser los poseedores de los bienes de producción, porque ¿para qué invierten?, muy sencillo, para nutrirse de dichas inversiones, sino, su empresa no sería competitiva de cara al exterior, y la mano de obra no tendría trabajo.
Por otra parte, el factor humano, es indispensable en toda empresa, siempre que el trabajo realizado sea compensado con el salario a percibir, es harto difícil que exista un punto de equilibrio entre oferta y demanda habida cuenta que por una parte el empresario tratará por todos los medios que los salarios sean lo suficientemente bajos como para que pueda contratar a más trabajadores y de esta manera su producción será mayor y también su rentabilidad, no obstante sabe que su empresa no funcionaria sin el factor humano, por lo tanto es complejo el mundo empresarial, aunque también quiero ser optimista y pensar que ambos han de ser conscientes de que el empresario aunque tenga los medios de producción tampoco sería nadie si esos medios no son movidos y activados por personas con capacidad para el desempeño del trabajo, que también es importante. Un saludo Gloria Ana.