UNA FERIA ANUAL PARA UN NUEVO FENÓMENO
La Feria inmobiliaria de nuda propiedad confía en el negocio de comprar pisos de ancianos con descuento esperando a que mueran pronto. La primera edición se celebró el 25 de octubre de 2018 en el Palacio de Cibeles de Madrid y se celebrará anualmente. El precio de los 500 pisos que se ofertan en el evento rondan los 150.000 euros. Un 40% y hasta un 90% más barato respecto a los costes que se piden en el mercado por el mismo tipo de inmuebles. Esta modalidad de compra se llama nuda propiedad. Cuatro agencias e inmobiliarias venden los pisos que están por toda España. La gran mayoría está en Madrid (100). El resto de ciudades con más oferta son Barcelona (60), Zaragoza (45), Sevilla (44), Bilbao (38) y Valencia (34). El piso más barato se vende por 56.000 euros en San Blas (Madrid) y el más caro cuesta 525.000 euros y está en la calle Nicaragua, también en la capital. Esta opción ha ganado adeptos en los últimos dos años. Los perfiles de los vendedores son los de personas mayores, principalmente entre 75 y 80 años, que quieren continuar viviendo en su casa pero la pensión no les da para llegar a fin de mes.
Epítome.
La Feria inmobiliaria de nuda propiedad confía en el negocio de comprar pisos de ancianos con descuento esperando a que mueran pronto. La primera edición se celebró el 25 de octubre de 2018 en el Palacio de Cibeles de Madrid y se celebrará anualmente. El precio de los 500 pisos que se ofertan en el evento rondan los 150.000 euros. Un 40% y hasta un 90% más barato respecto a los costes que se piden en el mercado por el mismo tipo de inmuebles. Esta modalidad de compra se llama nuda propiedad. Cuatro agencias e inmobiliarias venden los pisos que están por toda España. La gran mayoría está en Madrid (100). El resto de ciudades con más oferta son Barcelona (60), Zaragoza (45), Sevilla (44), Bilbao (38) y Valencia (34). El piso más barato se vende por 56.000 euros en San Blas (Madrid) y el más caro cuesta 525.000 euros y está en la calle Nicaragua, también en la capital. Esta opción ha ganado adeptos en los últimos dos años. Los perfiles de los vendedores son los de personas mayores, principalmente entre 75 y 80 años, que quieren continuar viviendo en su casa pero la pensión no les da para llegar a fin de mes.
Epítome.