No me corresponde entrar a comentar y pido disculpas a CIUDADANA y a CABRERO-Dos por intervenir. No se, pero me inclino por el desconcierto ante algunas observaciones y voy a preguntar, sin esa “agresividad” que ha hecho aparición y que yo mismo soy incapaz de descubrir. ¿Cuál sería la norma perfecta y aceptable para que nadie se sienta agredido en sus sensibilidades? Yo más bien creo que hay cuestiones que no se pueden debatir y ante la falta de argumentos sólidos y capaces de desmontar criterios opuestos, no queda mas remedio que huir de realidades. ¿Qué argumentos se emplearían para minimizar las desgracias de tantos seres inocentes condenados por las ambiciones del capitalismo desbocado? ¿Quién se atrevería a justificarlos? ¿Quién se atrevería, si no un osado escaso de empatía, en descalificar a quien lucha por minimizar esos daños no deseados? ¿No sería un insulto en si pretender que es necesario que unos mueran para que otros vivamos en la abundancia? No señor Cabrero-dos. Yo lucho dentro de mis posibilidades para que esto se corrija en parte y si usted pretende interpretar lo que digo como propaganda, panfleto o propaganda y calificarne/nos de “extrema izquierda” prefiero guardarme mi opinión sobre la suya. Ni hace falta ser de “derechas” o de “izquierdas” para ser empático, sensible y ante todo humano, y denunciar las muchas iniquidades independientemente de donde se produzcan o quienes las produzcan. Escribiría mucho más, pero me temo que más de uno interpretara lo que digo como mitin desfasado. Soy así y así me moriré